Estas imágenes fueron tomadas entre 1863 y 1877, durante el final de la denominada era Edo en Japón, la cual había comenzado aproximadamente en el 1600.
Las fotografías de Beato aportan gran valor histórico respecto de aspectos fundamentales, como la vestimenta de los samuráis, sus corazas, sus armas y costumbres.
Las fotografías de Beato aportan gran valor histórico respecto de aspectos fundamentales, como la vestimenta de los samuráis, sus corazas, sus armas y costumbres.
El autor estuvo en Japón durante la guerra civil, ocasión en la que fotografió a los que han sido definidos como los últimos guerreros samuráis. En las imágenes, aparecen con trajes ceremoniales y con algunas de sus cortesanas, sobre las que también se han tejido muchas historias.