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10 razas de perros que hoy están EXTINTAS ¡El #5 era hermoso!

No resulta sencillo hacer una estimación aproximada de la cantidad de razas de perros que existen en el mundo. En 2014, la Federación Cinológica Internacional, organismo mundial canino, estimó que había alrededor de 343 razas distintas, aunque es muy probable que actualmente haya algunas más, según han reconocido los científicos, bajo la premisa de que todos los años suele aparecer alguna nueva.

Hace unos días os hablábamos de las consecuencias de mantener los rasgos de los pedigrí a lo largo del tiempo, que en muchos casos se fomentaban por fines puramente estéticos y de ahí nuestra mayor crítica. Si nos remontamos siglos atrás, la búsqueda de la raza perfecta respondía a otros objetivos, que en el mejor de los casos era para ayudar en la caza o en campo, aunque también se buscaban otras características para fines menos éticos, como las peleas.

1. Kuri

El kuri es un perro de origen polinesio, introducido en Nueva Zelanda por los maoríes durante la época de migraciones, en algún momento entre el s. IX y XIV. Estos se comían su carne, pues era considerada un manjar, y sus dientes eran usados como pendientes. Afortunadamente hoy, esto sería impensable.
Esta raza ocupaba un lugar importante en la tradición y rituales maoríes. Antes de una contienda solía invocarse el poder del dios de la guerra Tu, a través de sacrificios humanos. Sin embargo, los kuris eran igual de válidos para este despropósito.
Todos los indicios apuntan a que nunca fue una raza demasiado abundante, que se extinguió después de la llegada de los colonos europeos, debido a los cruces entre las razas europeas y el exterminio masivo para proteger los ganados. Los últimos especímenes conocidos, una hembra y un cachorro, vivieron a finales del s. XIX y hoy se encuentran disecados en el Museo de Nueva Zelanda.

2. Talbot

El talbot fue un perro de caza de color blanco, original de Normandía, que fue usado y criado en Gran Bretaña. Al parecer, tenía un olfato bastante fino, y su estatura era tal que se decía que era capaz de tumbar a un ciervo macho en pleno invierno, aunque evidentemente no hay pruebas de esto.
Guillermo el Conquistador lo introdujo en Gran Bretaña en el siglo XI, aunque se extinguió debido a su carencia de propósito y a la necesidad de cuidados constantes. Es el antepasado más directo de los actuales beagle y bloodhound.

3. Molossus

Esta antigua raza de perro extinta es considerada comúnmente como el ancestro (en rivalidad con el Alano) de los perros de tipo mastín actuales y de muchas otras razas modernas.
La mayoría de los estudiosos apuntan que el molossus se originó con la gente Molossis, en las regiones montañosas del noroeste de la Antigua Grecia y del sur de Albania. Eran considerados perros feroces, utilizados para proteger los rebaños.
Aristóteles los menciona en su texto de zoología, Historia de los animales, escrito alrededor del 343 a.C., alabando su valentía y superioridad física. La raza molossus fue sin duda un gran perro, muy similar al mastín que conocemos hoy.

4. Perro de pelea cordobés

Se originó en Córdoba, Argentina, en el siglo pasado. Era un animal preparado para el combate por su valor y resistencia. Sin embargo, carecían de olfato y velocidad, sin contar con que su ferocidad hacia sus congéneres los hacía inútiles para la caza.
La raza era tan agresiva hacia otros perros, que los machos y las hembras preferían pelear entre ellos que aparearse. Esto, sumado a la cantidad de ejemplares que morían en las peleas de canes, llevó a su extinción.

5. Poi Hawaiano

Las familias hawaianas tenían a estos pequeños por varias razones, pero sin duda la más importante es que eran considerados protectores espirituales del hogar, y especialmente para los niños.
Por desgracia, con la llegada de tiempos difíciles estos perros fueron consumidos como alimento y la forma de hacerlos engordar era dándoles de comer “Poi”, una comida de origen hawaiano, de ahí su nombre. Con el tiempo, esta raza terminó extinguiéndose, pero el término “Perro Poi” se sigue usando en Hawai para referirse a los perros callejeros.

6. Paisley Terrier

El Terrier Paisley fue una raza de tipo terrier originaria de Gran Bretaña. Fue criado principalmente como mascota y se trata del progenitor del Yorkshire Terrier actual.
La raza fue llamada así ya que la mayoría de los perros venían de ese lugar, pero también fue llamado el Clydesdale Terrier, por otra ubicación en el Valle de Clyde, donde los perros fueron criados.
Al final la gente dejó de interesarse por esta raza, no propiciando su reproducción terminaron por extinguirse.

7. Braco de Puy

Fue una antigua raza francesa, de perros criados para la caza, ya que eran conocidos por ser rápidos y flexibles.
La raza se creó en Poitou en el s. XIX, mediante el cruce de bracos con lebreles. Posiblemente dos hermanos de apellido Puy cruzaron sus bracos franceses con los Sloughi traídos de África por soldados franceses. Al parecer, hace un tiempo quedaba un ejemplar hembra en las islas Canarias, pero la raza se consideró extinta por la falta de machos.

8. Perro de aguas de San Juan

Fue una raza canina natural de la península del Labrador, Canadá. Se conoce poco de las razas que lo originaron, aunque debió ser una mezcla aleatoria de antiguos perros de trabajo irlandeses, ingleses y portugueses. El número de ejemplares comenzó a declinar en el cambio del siglo XIX al XX. A principios de la década de 1980, la raza terminó por extinguirse.

9. Bullenbeisser

También conocido como bulldog alemán, eran perros de tipo moloso de pelaje corto y atigrado, muy musculosos y con grandes mandíbulas, que lo convertían en un buen compañero de caza. Se considera la predecesora de grandes razas caninas y se conocen bajo el nombre de Generación Bullenbeisser.

10. Paul Terrier Azul

Se trata de una raza bastante similar al Bullterrier actual, pero de color azul oscuro. Nadie sabe realmente de donde provenían originariamente; lo único que se sabe es que un marinero escocés llamado John Paul Jones, desembarcó a varios ejemplares en el pueblo de Kirkcudbright en 1770. Estos perros fueron adoptados por los gitanos de unos de los distritos, quienes desgraciadamente los utilizaban como perros de pelea.