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Introducción.

En esta página voy a describirle dos dispositivos para mejorar la combustión de combustibles líquidos en aparatos de combustión como, incineradores, calderas, motores de combustión interna de vehículos, camiones, embarcaciones y aviones, donde el combustible utilizado es un hidrocarburo líquido o gaseoso como, el gas, gas natural, butano, propano, queroseno, gasolina, gasóleo, etc..

Magnetizador de Combustible.

El método consiste en aplicar un campo magnético, mediante un imán permanente, para ionizar el combustible que alimenta a los dispositivos de combustión, con lo que podemos conseguir una combustión más completa, mejorando la eficiencia ( obteniendo un ahorro de combustible ) y reduciendo las emisiones contaminantes.

El combustible lo tratamos con un campo magnético de unos imanes permanentes montados en el conducto de entrada de combustible, que instalaremos de forma que su polo Sur esté en contacto con el conducto del combustible.

Funcionamiento.

La mayoría de motores de combustión interna utilizan combustibles líquidos, pero los combustibles líquidos no son combustibles (en estado líquido), es decir, solo se quema la parte vaporizada y mezclada con aire en el momento de la explosión.

Normalmente las emisiones de gases procedentes del motor de los vehículos son Hidrocarburos no quemados (CH), Monóxido de Carbono (CO), y Óxidos de Nitrógeno (NOx). Los Hidrocarburos no quemados y los Óxidos de Nitrógeno reaccionan con la atmósfera para formar humo. El humo es altamente oxidante en el ambiente y es la principal causa de la irritación de ojos y garganta, provoca mal olor, daña las plantas y reduce la visibilidad. Los Óxidos de Nitrógeno son también tóxicos. El Monóxido de Carbono perjudica la capacidad de la sangre de transportar oxígeno al cerebro, incrementando los tiempos de reacción y empeorando la capacidad de juicio.

Principalmente los combustibles son hidrocarburos. Estos hidrocarburos cuando pasan através de un campo magnético, cambian su orientación de magnetización a la dirección opuesta a la del campo magnético. Las moléculas de hidrocarburo cambian su configuración, al mismo tiempo que la fuerza intermolecular se reduce considerablemente. Esta modificación ayuda a dispersar las partículas del combustible, de forma que éste se vaporiza más fácilmente y por tanto se facilitat su combustión.

El combustible líquido o gaseoso utilizado en motores de combustión interna está compuesto de grupos de moléculas. Cada molécula incluye un determinado número de átomos, cada uno compuesto de su núcleo y de sus electrones orbitando su alrededor. Cada molécula tienen un campo magnético por sí misma, causado por la rotación de los electrones. De esta forma, existe una carga eléctrica, positiva (+) y negativa (-) en las moléculas de combustible. Por esta razón, las partículas de combustible de las cargas eléctricas positivas y negativas no se dividen en partículas más pequeñas ( los polos opuestos se atraen ). Por lo que, el combustible no está activamente interrelacionado con el oxigeno durante la combustión, provocando una combustión incompleta. Para mejorar esto, tenemos que descomponer o ionizar el combustible. Esta ionización la podemos conseguir con la aplicación de un campo magnético procedente de un imán permanente o de un electroimán, la ventaja que presentan los imanes permanentes sobre los electroimanes es que, los primeros, no consumen electricidad.

El combustible magnetizado produce una combustión más completa, proporcionando, mayor rendimiento del motor, ahorro de combustible, más potencia y reducción de Hidrocarburos, Monóxido de Carbono y Óxido de Nitrógeno en los gases de escape. Además, el combustible cargado magnéticamente disuelve el carbón del carburador, inyectores de gasolina, y cámaras de combustión, ayudando a limpiar el motor y a mantenerlo limpio.

Instalación.

Se define un imán como el objeto que puede producir un campo magnético exterior y atraer el hierro.

Todos los imanes tienen un polo Norte (N, Azul) y un polo Sur (S, Verde), que podemos identificar con una simple brújula.

El polo Norte atrae al polo Sur y repele al polo Norte, El polo Sur atrae al polo Norte y repele el polo Sur, es decir, los polos opuestos se atraen y los iguales se repelen.

Para conseguir los resultados más eficientes, tendremos que colocar un imán en la estrada de gasolina, entre la bomba de gasolina y el carburador (o inyectores). Para sujetarlo, utilizaremos un soporte de material no magnético, plástico, latón, cobre o aluminio. No es necesario cortar el tubo, con colocar los imanes en la parte exterior de éstos conductos es suficiente. Tampoco es necesario modificar el sistema de combustible o de encendido, ni son necesarios ajustes de ningún tipo.

Los imanes utilizados deben tiener una temperatura de Curie suficientemente alta como para poder mantener sus características magnéticas en las temperaturas de trabajo a que se van a exponer, ya que los imanes pierden parte de su fuerza cuando se someten a elevadas temperaturas. Los imanes Alnico pueden tener temperaturas de Courie de 760ºC a 890ºC, los cerámicos (o de ferrita) de 450ºC, los Neodimio de 310ºC a 360ºC y los Samario de 720ºC a 825ºC. Por lo tanto, la temperatura de Courie no és un factor que deba preocuparnos, ya que, el motor de un vehículo, difícilmente, va ha llegar a estas temperaturas en condiciones de seguir funcionando ;-).

Muestras de resultados.

En calderas y calentadores, podemos obtener una mejora de la combustión de manera que:

* La llama se vuelve más brillante y cambia de rojo a naranja claro, con lo que tenemos una llama a mayor temperatura.
* La altura de la llama se reduce, incrementado su grosor.
* Se obtiene una llama más constante.
* Se reduce el contenido de material contaminante en los gases de escape.

Resultados en tests de consumo realizados en automóviles.

- Ford de 1980 con un motor de 3.3 litros pasa de 18 MPG (Millas por Galón) a 24 / 27 MPG = > 33 / 50 % incremento de millas, es decir: 5.5 G/100M a 4.16 / 3.7 G/100M = > 25 / 32 % reducción de consumo.

- Toyota de 1970 en campo pasa de 35.8 MPG a 40.8 MPG = > +14 % incremento de millas, es decir: 2.7 G/100M a 2.45 G/100M = > 8 % reducción de consumo.

- Toyota de 1970 en ciudad, pasa de 21.4 MPG a 28.9 MPG => + 35 % incremento de millas, es decir: 4.6 G/100M a 3.4 G/100M = > 26 % reducción de consumo.

- Dodge pasa de 12 MPG a 19 MPG => + 59 % = > incremento de millas, es decir: 8.4 G/100M a 5.24 G/100M = > 37 % reducción de consumo.

- Citroën BX 19 Diesel con imanes cerámicos obtenidos de motores eléctricos de imán permamente, ha pasado de consumir unos 6 litros/100Km a unos 4.8 litros/100 km = > 20 % de reducción de consumo.

- Yamaha TZR 50 ha pasado de consumir unos 3.13 litros/100 km a unos 2 litros/100 km = > 36 % de reducción de consumo.

NOTA: Estas medidas son aproximadas, al sistema de medición utilizado no le sobra precisión, y el consumo de un vehículo depende de muchos factores, como són: la humedad ambiental, el desnivel de la carretera, la cantidad de carga, la velocidad ( la cantidad de tráfico, el tipo de conducción, etc...).

El procedimiento utilizado para medir el consumo de un vehículo es el siguiente:

* Llenar completamente el depósito de combustible.
* Poner a 0 el cuentakilómetros parcial del vehículo, o anotar los kilómetros totales.
* Utilizar el vehículo normalmente hasta realizar 150, 200 o más kms, cuantos más kilómetros más precisa será la medida.
* Volver a llenar el depósito, anotando los litros de combustible que han entrado ( L ) y los kilómetros ( KM ) realizados desde que llenó el depósito. L son los litros consumidos en los KM kilómetros realizados.
* Con estos datos, se puede calcular los litros de combustible por cada 100 km ( C ) que consume el vehículo en cuestión:

C = L / KM * 100=L/100km

* Instalamos los imanes.
* Volvemos a medir el consumo ( Ci ) por el mismo procedimiento, si es posible, con el mismo tipo de conducción ( rápida o lenta ), por el mismo recorrido, con la misma carga, etc... ( con las mismas condiciones ), procurando que la única diferencia entre la primera medición ( sin imán ), y la segunda ( con imán ) sea la presencia del imán.
* Calculamos el consumo con el imán instalado Ci.
* Calculamos la reducción de consumo en %.

( C-Ci ) / C * 100 = Reducción de consumo en %.

NOTA: Debido a la dificultad de controlar todos los factores que afectan al consumo de un vehículo ( humedad ambiental, viento, etc..), es posible que la variacion de uno o varios de estos factores haga que este test no indique la reducción de consumo esperada, debido, el incremento de consumo producido por la variación de las condiciones del experimento ( factores ambientales, carga, circular más por ciudad, etc...). Lo que estoy seguro que va ha notar es, una mayor facilidad de arranque y mejor respuesta del motor (con un ligero aumento de potencia) producidos por la mejora en la combustion.
Conclusiones.

Mediante un campo magnético podemos incrementar la energía del combustible, provocando cambios específicos a nivel molecular, con lo que facilitamos la combustión. Las moléculas de combustible se separan más fácilmente, reaccionando mejor con el oxígeno. Con lo que podemos obtener reducciones del:


80%-90% en las emisiones de Hidrocarburos.
60-80% de Monóxidos de Carbono.
20% de Óxidos de Nitrógeno.
40-60% de Humos.

Además de una reducción en el consumo de combustible entre el 10 y el 40 %, obteniendo ( en vehículos ) un incremento de kilometraje de entre el 14 y el 60 %, con la misma cantidad de combustible.

Otro beneficio que nos proporcionan estos dispositivos, es que, el campo magnético disuelve las partículas de carbón que se acumulan en el carburador, en los inyectores de combustible, y en la cámara de combustión, es decir, ayudan a limpiar y mantener limpio el motor.

Cuando un vehículo se utiliza mucho tiempo con un conducción lenta, dicho vehículo se "acostumbra" a ir despacio y cuando se le pide un poco más, el vehículo no responde. En mi opinión, esto es debido a que se acumulan los restos de una mala combustion ( partículas de carbón ), obstruyendo la salida de gases del motor y el escape, empeorando el rendimiento del vehículo. Posiblemente mediante la utilización de imanes este efecto no se produciría ya que el motor de mantiene límpio.

En cuanto al tipo de imanes, personalmente considero que la mejor solución es utilizar un pequeño imán Cerámico o de Ferrita en el conducto del combustible, fijado con una brida de plástico. Los imanes cerámicos no necesitan la protencción térmica ya que pueden trabajar a temperaturas de hasta 250ºC..

Espero q les sirva.