¿Estás cansado de mirarte en el espejo y sentirte deprimido, de evitar tu propio reflejo y de sentirte incómodo en reuniones sociales?
Bueno, no desesperes, la mayor parte del tiempo la fealdad es una cuestión de mala actitud. Pero incluso cuando se trata de una deformidad física real o la falta de algo, siempre se puede superar.
Pasos
1.Sonríe.
Lo creas o no, sonreír o no sonreír compone la mayor parte de lo que la gente piensa como "atractivo".
2.Piensa en las películas que has visto, ¿qué protagonistas sobresalen como los guapos, los atractivos?
3.Nuestros cerebros están programados para sentirse atraídos por las sonrisas desde que somos pequeños y pueden hacer milagros colocando ese “algo especial” en tu rostro. Si la gente a menudo no recuerda cómo luces, ellos serán capaces de recordar tu sonrisa o risa genuina.
4.Sé abierto y piensa en ti mismo como una persona atractiva.
La mayoría del tiempo las personas que se sienten feas se separan del resto por miedo a ser heridos. En su opinión, la esperada desaprobación del mundo parece merecida. No es así. En la mayoría de los casos, los demás ven a una persona como "fea" porque esa persona se ve así misma como "fea".
5.Párate frente a un espejo y reacciona a lo que ves como si fueras otra persona. Trátate con la misma decencia que le mostrarías a un extraño. Tú nunca te dirigirías a un extraño y le dirías: "¡Qué feo eres!", así que no lo hagas contigo. Sé amable contigo mismo y ofrece ayudar a esa persona del espejo de la forma que puedas, para que se vea y se sienta mejor y ¡hazlo! La cortesía común puede recorrer un largo camino para romper con la imagen de "feo" que tienes en tu mente.
Evita el tipo de personas superficiales que juzgan o escogen a los demás basados en su apariencia en lugar de quiénes son como personas y por lo que tienen para ofrecer al mundo.
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