El reino encantado del agua
Sin duda este es uno de los parques naturales más hermosos de Europa y la estrella destacada en esta región del Mediterráneo, aunque todavía no sea muy conocido. Descubre porqué en nuestra selección con las mejores imágenes de esta asombrosa sinfonía de azules, verdes y agua.
Plitvice se encuentra en Croacia, un territorio de la antigua Yugoslavia, no lejos del mar Adriático. Fue registrado en 1979 entre uno de los primeros sitios reconocidos como Patrimonio de la Humanidad natural en todo el mundo.
El parque cuenta con dieciséis lagos conectados entre sí por una serie de saltos de agua
Estos senderos están muy bien diseñados, no sólo porque te dirigen a través de escenarios increíbles, sino que también reducen el impacto de los visitantes al evitar que nos metamos y pisemos por todas partes.
Los lagos son famosos por su variado rango de colores, que cambian continuamente dependiendo de la composición de las aguas y de como se refleja luz que les llega.
Árboles hundidos en aguas cristalinas crean un espectáculo difícil de olvidar.
Prestando un poco de atención se pueden descubrir otro tipo de naufragios.
Otra característica del lugar es que el agua no siempre fluye por los mismos caminos. Espero que os gusten las cascadas, porque ahora vienen unas cuantas.
Plitvice parece un bosque encantado de cuento de hadas, pero también fue el escenario de un incidente que desencadenó una guerra.
En marzo de 1991, serbios y croatas se enfrentaron por el control del parque, provocando las dos primeras víctimas (una por bando) de la Guerra Croata de Independencia
Este paraíso natural se encuentra a pocos kilómetros de la frontera con Bosnia-Herzegovina.
También es un paraíso para fotógrafos.
El área es refugio para una gran variedad de animales salvajes. Osos y lobos habitan la zona, además de muchas especies de aves y peces
Nadar y pescar está estrictamente prohibido para proteger este frágil ecosistema.
El bosque que rodea los lagos es otra delicia.
Los lagos se suceden cayendo en cataratas uno tras otro, en una pendiente de unos ciento cincuenta metros, entre el que está en la parte superior hasta el más bajo al final del sistema.
Todas las estaciones son buenas para visitar el parque, como en otoño, sin tantos turistas y con el color rojo como añadido.
Los nuevos Jardines Colgantes de Babilonia.
Ya pasada la primavera, el verde se apodera de la gran cascada (78 metros) en la zona inferior de los lagos.
La misma foto de la gran cascada en la parte baja del parque, esta vez en el otoño.
Agudeza visual: trata de identificar y recordar en menos de cinco segundos lo que está prohibido hacer en el parque.