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La Marihuana no siempre estuvo prohibida. ¿Por qué? Esta sustancia es atacada al considerarla negativa para las personas. Conoce que personales la consumían.



Para quienes son adictos a la lectura, les cuento que la prohibición del Cannabis empieza a principios del siglo XX, y se resume a tres conceptos: EEUU, dinero y capitalismo voraz.

Como leyó, entre estos términos no se encuentra la palabra “salud”, que es la más utilizada por los anticannabis. En Holanda, donde todos sabemos que su consumo es legal, el porcentaje de drogodependientes de esta sustancia es del 1,3%, mientras que en otros países como España, donde lleva siendo ilegal, el procentaje asciende al 3%.

¿Pero cómo se convertió el cannabis utilizado por la humanidad desde tiempo inmemorables en una droga satanizada por políticos y medios de comunicación?

El origen puede ayudarnos a entender. Para prohibir el cáñamo en los Estados Unidos se construyó en los años treinta, una avalancha de mentiras sin fundamento que concluyó en el decreto Marijuana Tax Act, de 1937, donde la marihuana se vuelve ilegal. La única restricción existente hasta el momento consistía simplemente en una disposición que obligaba a que las sustancias alimenticias o farmacéuticas que contuvieran cannabis (así como otros componentes), lo indicaran en la etiqueta.

Los informes científicos de la época, indicaron que no existían problemas sanitarios o sociales relacionados con el cannabis. El informe de la Indian Hemp Drugs Commission, a finales del siglo pasado determinó en su estudio sobre consumo de cannabis en la Zona del Canal de Panamá entre 1916 y 1929 y “La guardia Committee Report on Marijuana” de 1944 que el consumo habitual no provoca apreciables problemas sanitarios, sociales o el consumo de drogas más fuertes. Sin embargo, drogas tan peligrosas como el alcohol pueden adquirirse y usarse sin problemas.



¿Como ocurrió todo?

Los primeros cuarenta años del siglo XX sirvieron para ilegalizar y, por tanto, llevar a la oscuridad del mercado negro sustancias que hasta ese momento se compraban sin problemas. En la historia de la prohibición, hay factores que se repiten. Uno de ellos consiste en asociar el uso de la sustancia al comportamiento de determinadas minorías. Entonces, se contaron historias de terror repletas de macabros asesinatos y agresiones sexuales, atribuídas a las sustancias que usaban.

Sin embargo, en la prohibición del cáñamo existen características peculiares. A nivel internacional, fue decisiva la intervención de Inglaterra en 1925 en la Convención Internacional del Opio, cuando se negó a firmar el tratado si no se incluía en él el control internacional del cannabis.

Los motivos de Inglaterra eran de orden político y relacionados con su papel como potencia colonial en Egipto. Los sectores egipcios partidarios de la independencia estaban intentando impedir la colonización inglesa. Aunque al resto de países firmantes del tratado la la marihuana no les suponía ningún problema en sus países, la presión de Inglaterra surtió efecto, ayudando a los intereses de otros países que eran potencias coloniales en el norte de África, como Italia o Francia.

Curiosamente, Estados Unidos nunca ratificó el acuerdo, pero años después fuertes intereses económicos ligados a Washington, trabajaron para restringir el cannabis. El cáñamo era utilizado por la industria como materia prima para la producción de papel, cuerdas y tela. Para la industria textil el cáñamo no constituía competencia para el algodón, dado que su recolección era más lenta y costosa, además que antes de ser usado era necesario tenerlo bastantes días en remojo. Pero en 1917, George Schlichten inventó una máquina, la descorticadora, que iba a servir para recolectar de manera más eficiente el cáñamo. La revista americana ‘Popular Mechanics’ publicó en 1938 un artículo titulado ‘El nuevo cultivo del billón de dólares’, donde afirmaba:

“A los granjeros americanos se les presenta la oportunidad de un nuevo tipo de cultivo por un valor anual de varios centenares de millones de dólares, se ha inventado una máquina que resuelve un problema de más de 6.000 años de antigüedad. Se trata del cáñamo, un cultivo que no competirá con otros productos americanos. Por el contrario, acabará con las importaciones de materias primas y productos manufacturados producidos por mano de obra barata, y proporcionará miles de puestos de trabajo para los americanos en todo el país”.



El Libro: El Emperador no lleva Ropa

Jack Herer, en su libro ‘The Emperor Wears No Clothes” (El Emperador no lleva Ropa) , expone una interesante teoría que resumiré brevemente. La invención de la descorticadora suponía una fuerte amenaza para la industria del algodón, fuertemente relacionada con los sectores políticos más influyentes, por tal motivo fomentaron la imagen diabólica del cáñamo a la opinión pública y crearon leyes restrictivas para su uso. Jack Herer nombra al “imperio DuPont” entre quienes forzaron la desinformación que ilegalizó al cáñamo debido a sus intereses en los tejidos sintéticos como el nylon.

La cadena de periódicos de William Randolph Hearst, quien tenía fuertes intereses en la industría papelera, amenazada por la simplificación de los procesos de conversión del cáñamo en papel, convirtió en mounstruos a emigrantes publicando artículos sensacionalistas. Uno de los más conocido, “Marihuana, asesina de nuestra juventud”, cuyo párrafos extraigo los siguientes:

“Su uso en forma de cigarrillos, es relativamente nuevo en nuestro país, y tan peligroso como una serpiente de cascabel enroscada. Pueden imaginarse cuántos asesinatos, robos, asaltos criminales, secuestros, atracos y ataques de locura maníaca causa cada año, especialmente entre los jóvenes. […] El año pasado, un joven adicto a la marihuana fue colgado en Baltimore por el asesinato de una niña de diez años. En Chicago, dos chicos fumadores de marihuana mataron a un policía. En Florida, la policía encontró un joven tambaleándose en medio de una matanza. Con un hacha había matado a su padre, su madre, dos hermanos y una hermana. No recordaba haber cometido ese crimen múltiple. De la nada un joven tranquilo y sano, se había vuelto loco por fumar marihuana. En al menos dos docenas de casos recientes de asesinato o degenerados ataques sexuales, se ha probado que la marihuana fue una causa que contribuyó. […]”

No deja de ser curioso que esta planta, que según William Randolph convertía a los jóvenes en salvajes homicidas, fuera acusada en los años ’60, al ser usada por excombatientes perturbados de Vietnam y por quienes protestaban contra la guerra, induciendo a los jóvenes a un ‘pacifismo antipatriota’ que incentivó los deseos de ir contra las normas.

Personajes que admitieron su consumo al cáñamo y que estuvieron en contra de su prohibición:


Alexandre Dumas

Andrea Corr

Ben Franklin

Bill Murray

Bob Dylan

Carlos Santana

Coppola

Dali

George Washington

Gore

Jack Kerouac

Jack Nicholson

Jane Fonda

Jennifer Aniston

John Lennon

Lewis Carroll

Lincoln

Louis Armstrong

Nietzsche

Oscar Wilde

Pancho Villa

Paul Mc Cartney

Peter Fonda

Peter Sellers

Picasso

La Reina Victoria

Ray Charles

Serrat

Stephen King

Steve Jobs

Steve Martin

Sting

Thomas Jefferson

Victor Hugo

Whitney Houston

William Shakespeare

Fuente http://elvalle.phpnet.us/2009/02/12/la-verdad-del-cannabis/