Siempre quise ver nieve a montones, era una deuda pendiente, el único día que nevó en mi pueblo yo me quedé dormido y tal como era de esperarse me perdí todo, ya el sol había borrado hasta el último copo de nieve ❄️.
Bueno 7 años después, para mi luna de miel, me di el gusto de ir a otro lado a ver nieve, si bien ya había ido 2 veces a San Martin de los Andes, siempre fue en verano, es una ciudad muy linda para ir en cualquier época del año de todas formas. Esperaba una nevada esa semana, ya era mitad de julio y no solo quería ver nieve el día que fuera al cerro Chapelco sino también algo de nieve en la ciudad.
La nieve ya estaba entre nosotros! vamos manaooos
La ruta de los siete lagos
La nevada se puso mas intensa 🌨 así que nos propusimos salir a la ruta de los siete lagos, la ingenuidad no tiene límites, la que nos esperaba... nunca pensamos que esos 21º pronosticados para la tarde nunca llegarían.
El primer lago de los 7 lagos es el Lácar, aún estaba lindo el día, pero mientras más nos adentrábamos en la ruta mas espesa se ponía la tormenta. "no te hagas drama es lo que vamos en subida, ya se va a poner mejor" dijo el peor copiloto del mundo, que era yo 🙃
El paisaje estaba hermoso, ya habiendo pasado la entrada a Villa Traful, estabamos a 2 lagos de terminar el recorrido...
Viajar unos cuantos km más no le podía hacer daño a nadie no?? claramente nos podríamos haber matado, pero ahí es cuando la vida nos dio una segunda chance, luego de quedarnos estancados un par de veces (gracias 4x4 que pasaban y nos sacaban) decidimos que era momento de volver.
Y lo peor de todo es que el camino ya estaba imposible:
La vuelta
No tengo fotos de lo que sigue porque ya estábamos con un cagazo terrible jaja, pero luego de esa parte nos dimos la vuelta y llegamos a una subida pronunciada (curva y contra curva) donde antes habíamos pasado bajando sin mayor problema, pero esta vez tapado el camino de nieve y con 3 autos que al parecer habían sufrido un accidente, y no solo eso, si no que estaban al menos 2 de ellos al filo de un precipicio que daba al bosque.
Por suerte ya las maquinas quitanieve pasaban abriendo el camino, y se hacía más fácil, porque si te comías la banquina te quedabas ahí hasta que no te sacaban.
Por suerte llegamos vivos y sanos
Y nos tomamos una birra como corresponde bien helada (?)
La llegada al hotel
El hotel tenía un generador eléctrico, pero no iba a durar tanto, llegó el momento en el que usaron el generador para lo indispensable y el resto a velas. Pasábamos el rato antes de cenar frente al fuego de la gran chimenea principal, y también salíamos al jardín principal a disfrutar la nieve, recién iban los primeros 2 días de nuestros 14, así que no había apuro.
El hotel atendido por sus dueños nos hicieron precio en la estadía y en las comidas, bueno no había a donde ir pero fue un buen gesto, ya que su culpa no era.
Me saqué las ganas de ver nieve por un largo rato diría yo.
Muñeco de nieve:
Hice mi muñeco de nieve como no hacerlo no? no?
Se terminó la tormenta
Como la tormenta había terminado, nos fuimos a ver la ciudad, otra vez el dueño del hotel nos bajó a la ciudad en la 4x4 porque aún habían zonas difíciles de transitar. Mucho daño había hecho la nieve en la infraestructura del lugar. Varios alares se habían roto y muchos autos habían quedado totalmente tapados en nieves como el nuestro.
La que estaba muy bonita era la costa del lago Lácar:
La segunda semana pudimos ir al centro de ski del Cerro Chapelco y la vista es hermosa:
Después de pasar dos semanas lindas en San Martín de los Andes, volvimos a nuestro caluroso origen.
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Extras
Compren mermeladas en la Chacra La Constancia no se van a arrepentir, recomendada la de grosella