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Un tribunal neozelandés ha puesto en libertad condicional al fundador de Megaupload, Kim Schmitz, curiosamente cuando la justicia estadounidense acaba de añadir otros ocho cargos adicionales en su contra y de paso, bastante marketing, vital para estos casos de denuncias contra la propiedad intelectual.

El tipo más malvado de la Red de la redes, acusado con gran fanfarria de una buena parte de los males que aquejan al planeta, está en la calle, después que un tribunal de distrito considerase que no representa riesgo de fuga y suponemos que tampoco ve en el informático alemán, el criminal de criminales como lo considera el FBI.

La puesta en libertad bajo fianza del fundador de Megaupload, se produce -casualidades de la vida- un día después que el departamento de estado estadounidense, añadiera ocho cargos adicionales por infracción de copyright y fraude electrónico, más una buena cantidad de marketing.

Nueva curiosidad temporal, ya que la operación contra Megaupload se produjo justo tras la gran campaña de protesta en Internet contra las normas antipiratería censoras SOPA y PIPA, una coincidencia que medios críticos siguen relacionando.

En todo caso, un mes después de su detención, Kim Schmitz ha sido liberado bajo fianza (como el resto de administradores) a la espera de determinar su extradicción. Veremos si un caso que empezó con ‘mucho ruido’ termina con ‘pocas nueces’.