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La industria de las DRAM está en muy mal estado

Un par de meses atrás, el CEO de Micron, Mark Durcan, aseguró que la caída del fabricante Elpida ayudaría a recuperar el alicaído mercado de las memorias DRAM, el que sufre de un exceso de oferta y poca demanda de los ensambladores (Dell, HP, etc), lo que tendría el precio de estos productos por el suelo, algo beneficioso para los consumidores, pero nefasto para una industria que no saca ganancias y tiene miedo de seguir los pasos de la difunta Elpida.

Pero las palabras de Mark Durcan al parecer fueron sólo humo, ya que ha pasado el tiempo y las cosas para las DRAM van de mal en peor.

Porque según se reporta, los ensambladores de PCs tienen gran cantidad de inventario acumulado en sus bodegas, con módulos de RAM que no han podido utilizar en sus productos a raíz del lento ritmo de ventas que han tenido las computadoras en general.

Algunas marcas tienen tantas RAM, que les alcanza para suplir sus necesidades por hasta seis meses, siendo que lo normal es que tengan stock para sobrevivir seis semanas.

Y es que a diferencia de lo que creyó el CEO de Micron, la caída de Elpida no hizo más que empeorar las cosas, ya que cuando ésta se fue a la bancarrota los ensambladores creyeron que habría algo de escasez y aseguraron de antemano sus pedidos, apilando los seis meses de stock ya mencionados.

Ahora, la industria de las DRAM tiene sus fichas puestas en Windows 8, sistema operativo de Microsoft del cual depende el despegue de quizás demasiados productos, contando los ultrabooks, tablets, SSDs y ahora las DRAM, a la espera de un alza dramática en la venta de toda clase de PCs.

De lo contrario, el precio de las DRAM seguirá bajando, y si bien en el corto plazo esto es bueno para el consumidor, en el mediano plazo puede provocar tanta inestabilidad en la industria, que podría ocurrir algo parecido a lo que sucedió con los discos duros, cuyo precio hoy está por las nubes.