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En realidad fue Macri, pero estamos viendo si con Cristina le dan mas bola al problema.

Los pacientes del Borda no pueden usar el nuevo taller




El taller construido por el gobierno de la Ciudad está cerrado por no cumplir con las condiciones básicas de salubridad y seguridad.

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También hay problemas con la conexión de gas y de agua. También hay problemas con la conexión de gas y de agua. ‹ › 1 2 3 4 5 6 7
La puerta de Brandsen al 2665, la única del nuevo taller protegido que da a la calle, está cerrada. Antes de demoler el viejo taller protegido, el Gobierno armó un pasaje desde el hospital Borda hasta el nuevo taller y allí construyó un ascensor y una escalera. Si un paciente quiere entrar, no puede porque ambas están cerradas. “En algún momento lo pusieron en funcionamiento, pero no estaba en condiciones y tuvieron que cerrarlo”, indicó Eduardo Baleano, operador terapéutico de la institución Talleres Protegidos.

El nuevo taller protegido fue construido a 100 metros del anterior, pero no está en los terrenos del hospital Borda, sino que pertenece a Talleres Protegidos. “El viejo taller 19 era interno del hospital Borda, pero lo conducía Talleres Protegidos”, manifestó Gabriel Cavia, secretario general de la Asociación de Profesionales del Hospital Borda.

El conflicto por el taller viene desde hace tiempo. El 8 de agosto de 2012 el gobierno de la Ciudad intentó ingresar de noche para derrumbar el viejo taller protegido, pero se hizo un recurso de amparo para proteger esos terrenos declarados patrimonio histórico nacional, incluido el viejo taller. El 26 de abril de 2013 venció el plazo de la medida cautelar, pero, como afirma Cavia, “al tener la posibilidad de apelar, la medida seguía vigente”. Sin embargo, se produjo el ingreso del Gobierno con la policía Metropolitana y la destrucción del taller 19.

Según el gobierno de la Ciudad, el taller construido para reemplazar al anterior estuvo reacondicionado el 5 de septiembre de 2012 para la recepción de pacientes, pero casi no pudieron utilizar esta nueva instalación. Un informe de los bomberos señaló que hay problemas de seguridad por una deficitaria señalización de las salidas de emergencia e inconvenientes de salubridad, porque las máquinas instaladas exceden los decibeles permitidos por las normas.

El taller viejo tenía en el techo chapas acanaladas con asbesto, un material cancerígeno. A pesar de esto, el gobierno de la Ciudad derrumbó el edificio y las chapas se pulverizaron, liberando todo el asbesto. Ante las denuncias realizadas por la contaminación que afecta al hospital y a los vecinos, el Gobierno envió una empresa a tomar muestras. Todavía los escombros están allí y se desconocen los resultados del informe ambiental.

“Los talleres protegidos son importantes para la reinserción de los pacientes en la sociedad” afirmó la doctora Beatriz Zapata, jefa del servicio 22 del hospital Borda. Allí aprenden distintas profesiones mediante la práctica de la herrería y la carpintería y construyen muebles para los hospitales junto a las personas de Talleres Protegidos. Pese a no haber pacientes, los operadores deben cumplir su trabajo igual. Durante un tiempo trabajaron en ese taller en malas condiciones y luego los derivaron a otro en Coronel Suárez.

El nuevo taller protegido comparte el edificio con un taller de costura y un laboratorio. Se encuentra en el segundo piso, lo cual dificulta la llegada de algunos pacientes, según dijo la doctora Zapata. Además, Baleano indicó otra dificultad: el encierro que sienten los pacientes dentro del nuevo taller. “Para el paciente psiquiátrico es muy importante tener amplitud de vista. Desde la ventana del viejo taller veía el parque; en el nuevo no ve nada”, manifestó.

De la maquinaria que había en el viejo taller protegido, la mitad fue derivada al Ministerio de Salud porteño y la otra está al aire libre, según Baleano. En su página de internet, el gobierno de la Ciudad indica que el nuevo taller posee equipamiento “totalmente renovado”. No obstante, para Eduardo Baleano, las nuevas máquinas que compraron no son de la misma envergadura ni la misma calidad que las del taller viejo.

La Justicia ordenó el 13 de agosto pasado la reapertura del taller protegido nuevo o de algún espacio que cumpla las funciones del taller en un plazo de 20 días. Hasta este momento, el taller permanece cerrado.

Talleres Protegidos actualmente está juntando firmas para presentar en la Legislatura un proyecto de ley para la reconstrucción del taller 19 en el mismo lugar donde estaba, dentro del hospital Borda. Es muy difícil, por todo lo mencionado, que el taller nuevo cumpla con las mismas funciones que el anterior. Los talleres protegidos están pensados para el beneficio de los pacientes, pero así cerrado como está ahora y sin ningún espacio que cumpla su función, los internos del hospital Borda son los únicos perjudicados.

Nota original

¿Que pasa Mauricio si no ceden con el centro cívico no habilitas el taller?

Y hay más:

http://prenser.com/733/El_Hospital_Borda_perdido_en_la_incerti.html