Un suboficial de la Policía Federal fue asesinado por la espalda de un tiro en la cabeza por uno de los seis delincuentes que vestidos como falsos operarios, asaltaron a un financista que se dirigía al banco que custodiaba la víctima.
El hecho ocurrió alrededor de las 11 en la esquina de avenida Córdoba y Lavalleja, donde se produjo un asalto en la calle justo delante de un kiosco.
Los delincuentes eran cuatro vestidos como falsos operarios, con cascos y barbijos, que simulaban hacer reparaciones en la vía pública.
Cuando el suboficial Castillo advirtió que se trataba de un asalto, alcanzó a sacar y montar su pistola reglamentaria, pero uno de los cuatro ladrones fue más rápido, lo sorprendió por la espalda, lo tomó del cuello y le efectuó un tiro en la cabeza.
En total, los delincuentes eran seis, ya que los cuatro falsos operarios escaparon del lugar a toda velocidad en dos motos conducidas por otros dos cómplices que actuaban de choferes.
"Se fueron a toda velocidad montados en dos motos, tres delincuentes en cada una de ellas",
Castillo quedó gravemente herido tendido en la vereda, con el arma reglamentaria que no alcanzó a usar, tirada a su lado.
En pocos minutos, un helicóptero de la PFA fue enviado al lugar y aterrizó en plena avenida Córdoba y Pringles, para el traslado del efectivo baleado.
Castillo fue asistido durante el vuelo al hospital policial Churruca, pero allí llegó fallecido por la gravedad de la herida.
Si bien en principio algunos vecinos contaron a la prensa que el policía venía acompañando a la víctima del asalto desde la financiera, tres fuentes policiales lo desmintieron y aclararon a Télam que Castillo sólo trabajaba en el banco y de allí había salido, uniformado, hacia el lugar donde finalmente lo mataron.
El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, aseguró que el policía "falleció protegiendo a los ciudadanos" y le envió un mensaje a los familiares de la víctima, a quienes les dijo que "tengan la certeza" de que no descansará hasta detener "a los delincuentes que cometieron este crimen cobarde".
El policía fallecido era el sargento primero Juan Orlando Castillo (44), numerario de la División Armamento y Munición quien, además, prestaba servicio como policía adicional en la sucursal del Banco Nación de avenida Córdoba 4402, esquina Julián Alvarez.
El hecho ocurrió alrededor de las 11 en la esquina de avenida Córdoba y Lavalleja, donde se produjo un asalto en la calle justo delante de un kiosco.
Los delincuentes eran cuatro vestidos como falsos operarios, con cascos y barbijos, que simulaban hacer reparaciones en la vía pública.
Cuando el suboficial Castillo advirtió que se trataba de un asalto, alcanzó a sacar y montar su pistola reglamentaria, pero uno de los cuatro ladrones fue más rápido, lo sorprendió por la espalda, lo tomó del cuello y le efectuó un tiro en la cabeza.
En total, los delincuentes eran seis, ya que los cuatro falsos operarios escaparon del lugar a toda velocidad en dos motos conducidas por otros dos cómplices que actuaban de choferes.
"Se fueron a toda velocidad montados en dos motos, tres delincuentes en cada una de ellas",
Castillo quedó gravemente herido tendido en la vereda, con el arma reglamentaria que no alcanzó a usar, tirada a su lado.
En pocos minutos, un helicóptero de la PFA fue enviado al lugar y aterrizó en plena avenida Córdoba y Pringles, para el traslado del efectivo baleado.
Castillo fue asistido durante el vuelo al hospital policial Churruca, pero allí llegó fallecido por la gravedad de la herida.
Si bien en principio algunos vecinos contaron a la prensa que el policía venía acompañando a la víctima del asalto desde la financiera, tres fuentes policiales lo desmintieron y aclararon a Télam que Castillo sólo trabajaba en el banco y de allí había salido, uniformado, hacia el lugar donde finalmente lo mataron.
El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, aseguró que el policía "falleció protegiendo a los ciudadanos" y le envió un mensaje a los familiares de la víctima, a quienes les dijo que "tengan la certeza" de que no descansará hasta detener "a los delincuentes que cometieron este crimen cobarde".
El policía fallecido era el sargento primero Juan Orlando Castillo (44), numerario de la División Armamento y Munición quien, además, prestaba servicio como policía adicional en la sucursal del Banco Nación de avenida Córdoba 4402, esquina Julián Alvarez.