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link: https://www.youtube.com/watch?v=fifbkL6Cle4&feature=youtu.be


Un desigual capítulo de la antología.



Regresa Alien, nuevamente de la mano de Ridley Scott, y esta nueva precuela, Alien: Covenant, hará el intento de sostener los temas filosófico-cientificos de Prometeo, al mismo tiempo que tratar de devolverle a la saga ese tono de “Texas Chainsaw Massacre pero en el espacio” que supo tener la película de 1979. Una mezcla que puede salir rica dependiendo de como la sirven en algunas escenas.




Alien: Covenant tiene cosas a favor y cosas en contra. Por el costado de lo positivo, es una historia que contesta todas las preguntas que plantea (no como Prometeo), el universo de las precuelas ha dado un paso gigantesco hacia su conexión con Alien, pero lo más positivo es que es abraza su esencia gore, y una vez que se pone en marcha este no para, volviendo a lo que Alien fue en primer lugar: un slasher (o sea, un grupo de personas completamente aisladas siendo asesinadas una por una), lo que contribuye a que en esta película haya, comparativamente respecto de su predecesora, mucha más acción y se sepa construir la tensión entre momento y momento, entre cadáver y cadáver.



Dentro de los aspectos negativos, muy a menudo es un calco estructural de la película original de 1979. No solo esto, sino que, pasada la mitad del segundo acto, Alien: Covenant se vuelve una secuela muy dependiente de lo establecido por Prometeo, y por ende demasiado expositiva por momentos.

Independientemente de las asociaciones con títulos previos, como película por sí misma, la historia tiene alguna que otra meseta en su narración. Casi siempre a manos de reflexiones filosóficas sobre la creación y la evolución del hombre. Si bien esto propone un contenido de gran profundidad, más que tener una relevancia para el conflicto principal se siente que está ahí para hacer tiempo, ya que estos debates, a menudo, no son esenciales para resolver el conflicto o hacer crecer a los personajes. Aparte, tanto la resolución como los giros narrativos que, se supone, deben resultar en una sorpresiva revelación, son anticipables y, para colmo, la protagonista es pasiva salvo por unas poquitas escenas. Por fuera de eso, llora, se deprime, y contribuye más al desenlace que a generarlo directamente.

Visualmente la película es impecable; no hay mucho que argumentar contra Ridley Scott a esta altura del partido.



Conclusión:

Si buscan una peli donde estén involucrados el gore, los climas y la tensión, Alien: Covenant puede llegar a satisfacerlos. Cuando se entrega a este espíritu, el de contar una historia de “guarda que te come el bicho”, es donde la película tiene sus momentos más logrados.

Por desgracia, su deseo de entretejer en esta una historia emocional, un contenido temático (arraigado en lo filosófico/científico), y una continuidad con las películas anteriores resulta forzado, cuando no fallido. Si a esto le sumamos una protagonista un poco pasiva, el resultado es desigual. No hay nada de malo en que una película de esta naturaleza apunte con vehemencia a abordar cuestiones intelectuales. Sin ir más lejos, la Ciencia Ficción existe precisamente por (y para) dichos debates. Pero si estos no guardan una relevancia dramática, los espectadores o se van a acordar del gore o se van a acordar de los debates, cuando deben ser los dos una unidad que se nutra la una de la otra.


Resumen Taringuero Nivel 5: Es una buena mezcla entre Prometheus y las Alien clasicas, no es una obra de arte pero zafa.