Urgente el plan Cóndor sigue vigente
Introducción :
La Operación Cóndor –llamada también Plan Cóndor u Operativo Cóndor– fue
un esquema multinacional de eliminación de dirigentes de la izquierda
suramericana ideado y ejecutado por Estados Unidos y las dictaduras del Cono
Sur de América (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay) que
alcanzó su clímax en la década de 1970. Pero sigue vigente y multiplicada claro
que con otros nombres y en diferentes latitudes.
Cóndor introdujo y multiplicó en la región episodios tan crueles como el
secuestro y asesinato en París del dirigente marroquí Mehdi Ben Barka, uno de
los organizadores de la Conferencia Tricontinental de La Habana de 1966, quien
pereció en 1965 en una criminal operación de inteligencia en la capital francesa
(1) Pareciera que todo esto pertenece al pasado, pero los grandes medios
informativos ocultan que Estados Unidos lleva a cabo una suerte de Nueva
Operación Cóndor planetaria, con secuestros, ejecuciones secretas, centros de
tortura ilegales como Guantánamo y prisiones clandestinas flotantes y en tierra
firme en diferentes lugares del mundo.
Cóndor practicó secuestros y asesinatos “estilo Ben Barka” en todo el Cono Sur,
e incluso sus tentáculos a menudo llegaron más lejos, como en el bombazo al
automóvil del ex canciller y ex ministro de defensa del Dr. Salvador Allende,
Sólo en Buenos Aires, la Operación Cóndor secuestró, dio muerte y/o
desapareció a notables personalidades exiliadas en Argentina, como el general
Juan José Torres, ex presidente de Bolivia muerto el 2 de junio de 1976 por
órdenes del dictador Hugo Bánzer Suárez, y cuyos restos debieron trasladarse a
México para recibir allí honras fúnebres. Otra víctima fue el ex comandante en
jefe del ejército chileno bajo Salvador Allende, general Carlos Prats González,
asesinado por bomba el 30 de septiembre de 1974 junto a su esposa Sofía
Cuthbert, por orden del dictador Augusto Pinochet. La bomba fue instalada por
el mismo individuo que dio muerte a Letelier, el agente CIA-DINA (Dirección
Nacional de Inteligencia de Chile) Michael Townley. Pero la Operación Cóndor
también secuestró, trasladó secretamente de un país a otro, torturó y exterminó a
numerosos dirigentes de menor relevancia, e incluso simples militantes
políticos, como los uruguayos Rosario del Carmen Barredo y William Whitelaw,
entre muchos más.
Masacre de latinoamericanos
También en Buenos Aires, por instrucciones del entonces presidente de Uruguay
Juan María Bordaberry, los agentes Cóndor secuestraron el 18 de mayo de 1976,
y más tarde asesinaron, al senador y periodista uruguayo Zelmar Raúl Mic helini
Guarch, plagiado simultáneamente con su amigo Héctor Gutiérrez Ruiz, ex
presidente de la Cámara de Diputados de su país, cuyos cadáveres fueronhallados juntos el 21 de mayo. El 17 de mayo de 2002,
la revista uruguaya Brecha publicó testimonios hasta entonces desconocidos que describen una
reunión entre Bordaberry, sus ministros de Interior y Defensa, los tres
comandantes en jefe y un coronel argentino, en que se acordó la muerte de
Michelini y de Gutiérrez
Más víctimas de Cóndor
Otra víctima chilena de esta operación transnacional fue el sociólogo chileno
Jorge Isaac Fuentes Alarcón, dirigente del MIR apresado y torturado en
Asunción, Paraguay, en 1975, y trasladado secretamente a Chile, donde fue visto
por otros detenidos que sobrevivieron en el campo de exterminio de Villa
Grimaldi, en Santiago, convirtiéndose hasta hoy en detenido desaparecido,
cuyos restos jamás aparecieron
La Escuela de las Américas II
Almada, junto a otros luchadores por los derechos humanos, hoy está empeñado
en que desaparezca la nueva versión de la Escuela de las Américas, un centro
clave de formación de torturadores de la Operación Cóndor. Establecida en
Panamá en 1946, la fatídica SOA (por su sigla en inglés), fue trasladada a Fort
Benning, Georgia, en 1984, donde actualmente funciona con otro nombre. Las
protestas contra esta escuela del crimen provienen también de ciudadanos
estadounidenses decentes, entre otros la organización SOA Watch. El jurista
Almada está pidiéndole al gobierno de Fernando Lugo que Paraguay cese de
enviar soldados a la escuela de asesinato y tortura del ejército estadounidense
que funciona en Georgia bajo el nombre de Western Hemisphere Institute for
Security Cooperation (Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación
en Seguridad, WHINSEC por su sigla en inglés), con sucursales en El Salvador
y Perú. Habría que exigir lo mismo a la mayoría de los gobiernos
latinoamericanos.
Crímenes aquí y ahora…
Pero hoy asistimos a una gigantesca Operación Cóndor de nueva factura que se
expande a nivel planetario. Existen evid encias de que la CIA utiliza como
prisión secreta para sospechosos a una base aérea de EEUU en la isla británica
Diego García y trabaja con el gobierno de Londres para impedir el regreso de los
habitantes originales que fueron forzados a abandonarla a fines de los años 60.
El general estadounidense jubilado de cuatro estrellas Barry McCaffrey ha
indicado que Diego García fue utilizada para detener a sospechosos de
terrorismo. Las mismas denuncias provienen de un senador suizo, del relator
especial para la tortura de la ONU, de detenidos anteriores y de la organización
no gubernamental de derechos humanos Reprieve, del Reino Unido, que ha
dedicado varios años a investigar las misteriosas detenciones en prisiones
secretas.
El ministerio de Relaciones Exteriores británico continúa apelando ante la Alta
Corte por la expulsión ilegal de los 2.000 residentes originales de Diego García.
EEUU ha dicho que si permiten su regreso los isleños presentarían un “riesgo
inaceptable” a su base. Solamente han reconocido que en 2002 hubo dos vuelos
que transportaron detenidos a Diego García.
Abundan, además, las denuncias de que EEUU opera “prisiones flotantes”
secretas que mantienen a un número desconocido de prisioneros de su guerra
secreta antiterrorista. Según abogados de derechos humanos, EEUU también haAbundan, además, las denuncias de que EEUU opera “prisiones flotantes”
secretas que mantienen a un número desconocido de prisioneros de su guerra
secreta antiterrorista. Según abogados de derechos humanos, EEUU también ha
Ayudame a hacer top este copiar y pegar lince!
La Operación Cóndor –llamada también Plan Cóndor u Operativo Cóndor– fue
un esquema multinacional de eliminación de dirigentes de la izquierda
suramericana ideado y ejecutado por Estados Unidos y las dictaduras del Cono
Sur de América (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay) que
alcanzó su clímax en la década de 1970. Pero sigue vigente y multiplicada claro
que con otros nombres y en diferentes latitudes.
Cóndor introdujo y multiplicó en la región episodios tan crueles como el
secuestro y asesinato en París del dirigente marroquí Mehdi Ben Barka, uno de
los organizadores de la Conferencia Tricontinental de La Habana de 1966, quien
pereció en 1965 en una criminal operación de inteligencia en la capital francesa
(1) Pareciera que todo esto pertenece al pasado, pero los grandes medios
informativos ocultan que Estados Unidos lleva a cabo una suerte de Nueva
Operación Cóndor planetaria, con secuestros, ejecuciones secretas, centros de
tortura ilegales como Guantánamo y prisiones clandestinas flotantes y en tierra
firme en diferentes lugares del mundo.
Cóndor practicó secuestros y asesinatos “estilo Ben Barka” en todo el Cono Sur,
e incluso sus tentáculos a menudo llegaron más lejos, como en el bombazo al
automóvil del ex canciller y ex ministro de defensa del Dr. Salvador Allende,
Sólo en Buenos Aires, la Operación Cóndor secuestró, dio muerte y/o
desapareció a notables personalidades exiliadas en Argentina, como el general
Juan José Torres, ex presidente de Bolivia muerto el 2 de junio de 1976 por
órdenes del dictador Hugo Bánzer Suárez, y cuyos restos debieron trasladarse a
México para recibir allí honras fúnebres. Otra víctima fue el ex comandante en
jefe del ejército chileno bajo Salvador Allende, general Carlos Prats González,
asesinado por bomba el 30 de septiembre de 1974 junto a su esposa Sofía
Cuthbert, por orden del dictador Augusto Pinochet. La bomba fue instalada por
el mismo individuo que dio muerte a Letelier, el agente CIA-DINA (Dirección
Nacional de Inteligencia de Chile) Michael Townley. Pero la Operación Cóndor
también secuestró, trasladó secretamente de un país a otro, torturó y exterminó a
numerosos dirigentes de menor relevancia, e incluso simples militantes
políticos, como los uruguayos Rosario del Carmen Barredo y William Whitelaw,
entre muchos más.
Masacre de latinoamericanos
También en Buenos Aires, por instrucciones del entonces presidente de Uruguay
Juan María Bordaberry, los agentes Cóndor secuestraron el 18 de mayo de 1976,
y más tarde asesinaron, al senador y periodista uruguayo Zelmar Raúl Mic helini
Guarch, plagiado simultáneamente con su amigo Héctor Gutiérrez Ruiz, ex
presidente de la Cámara de Diputados de su país, cuyos cadáveres fueronhallados juntos el 21 de mayo. El 17 de mayo de 2002,
la revista uruguaya Brecha publicó testimonios hasta entonces desconocidos que describen una
reunión entre Bordaberry, sus ministros de Interior y Defensa, los tres
comandantes en jefe y un coronel argentino, en que se acordó la muerte de
Michelini y de Gutiérrez
Más víctimas de Cóndor
Otra víctima chilena de esta operación transnacional fue el sociólogo chileno
Jorge Isaac Fuentes Alarcón, dirigente del MIR apresado y torturado en
Asunción, Paraguay, en 1975, y trasladado secretamente a Chile, donde fue visto
por otros detenidos que sobrevivieron en el campo de exterminio de Villa
Grimaldi, en Santiago, convirtiéndose hasta hoy en detenido desaparecido,
cuyos restos jamás aparecieron
La Escuela de las Américas II
Almada, junto a otros luchadores por los derechos humanos, hoy está empeñado
en que desaparezca la nueva versión de la Escuela de las Américas, un centro
clave de formación de torturadores de la Operación Cóndor. Establecida en
Panamá en 1946, la fatídica SOA (por su sigla en inglés), fue trasladada a Fort
Benning, Georgia, en 1984, donde actualmente funciona con otro nombre. Las
protestas contra esta escuela del crimen provienen también de ciudadanos
estadounidenses decentes, entre otros la organización SOA Watch. El jurista
Almada está pidiéndole al gobierno de Fernando Lugo que Paraguay cese de
enviar soldados a la escuela de asesinato y tortura del ejército estadounidense
que funciona en Georgia bajo el nombre de Western Hemisphere Institute for
Security Cooperation (Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación
en Seguridad, WHINSEC por su sigla en inglés), con sucursales en El Salvador
y Perú. Habría que exigir lo mismo a la mayoría de los gobiernos
latinoamericanos.
Crímenes aquí y ahora…
Pero hoy asistimos a una gigantesca Operación Cóndor de nueva factura que se
expande a nivel planetario. Existen evid encias de que la CIA utiliza como
prisión secreta para sospechosos a una base aérea de EEUU en la isla británica
Diego García y trabaja con el gobierno de Londres para impedir el regreso de los
habitantes originales que fueron forzados a abandonarla a fines de los años 60.
El general estadounidense jubilado de cuatro estrellas Barry McCaffrey ha
indicado que Diego García fue utilizada para detener a sospechosos de
terrorismo. Las mismas denuncias provienen de un senador suizo, del relator
especial para la tortura de la ONU, de detenidos anteriores y de la organización
no gubernamental de derechos humanos Reprieve, del Reino Unido, que ha
dedicado varios años a investigar las misteriosas detenciones en prisiones
secretas.
El ministerio de Relaciones Exteriores británico continúa apelando ante la Alta
Corte por la expulsión ilegal de los 2.000 residentes originales de Diego García.
EEUU ha dicho que si permiten su regreso los isleños presentarían un “riesgo
inaceptable” a su base. Solamente han reconocido que en 2002 hubo dos vuelos
que transportaron detenidos a Diego García.
Abundan, además, las denuncias de que EEUU opera “prisiones flotantes”
secretas que mantienen a un número desconocido de prisioneros de su guerra
secreta antiterrorista. Según abogados de derechos humanos, EEUU también haAbundan, además, las denuncias de que EEUU opera “prisiones flotantes”
secretas que mantienen a un número desconocido de prisioneros de su guerra
secreta antiterrorista. Según abogados de derechos humanos, EEUU también ha
Ayudame a hacer top este copiar y pegar lince!