Las esponjosas nubes llenas de agua sucia se habían atravesado en el verso que intentaba escribir, a veces parece que uno quiere escribir sobre temas concretos, como la actualidad, el pasado, o alguna cosa que pasa. Y de repente un paisaje, uno imperdible, se nos pone en frente y nos obliga a hablar de él.
Terminamos sin saber qué íbamos a hacer, nos avasalla una simple sensación, la que, a su vez, es suficiente para barrer todo pensamiento objetivo que pueda haber aparecido.
Últimamente intento ponerle objetividad a mi vida para salir de una inmensa nube que se me atravesó hace un año, son esas cosas que parece que uno maneja, pero no, la mente. Un vertiginoso juego de sustancias que pueden hacer lo que quieren con uno, objetivamente son sólo sustancias, cosas químicas. Pero la vida real no es objetiva por lo tanto lo que parece que son simples sustancias, son enfermedades mentales, que duran hasta que se termina la sustancia, luego periódicamente vuelven a aparecer.
Y así mi vida se convirtió en una montaña rusa, inmanejable, irreconocible, a veces insostenible, saben a qué me refiero con que la vida puede ser insostenible.
Aunque el otro día busqué mejor y le llaman crisis existencial, cuando todo lo que creías, toda tu estructura mental se desmorona, de repente estas parada en el medio de la nada, no hay suelo, ni cielo, ni nada, muchas veces no hay aire.
Bueno eso es lo que estoy atravesando, no se si este post es un llamado a la solidaridad, lo que pasa es que siempre dije que para escribir hay que sentir y lo que siento es esto.
La crisis existencial se basa principalmente en la idea de no tener la mas puta idea de nada, o sea no sabes para qué hiciste lo que hiciste, ni por qué no pudiste hacer lo que querías, ni cómo salir de esto, ni a dónde te estás dirigiendo, resulta que de repente trabajaste toda tu vida para lograr algo que por alguna u otra manera no se dió y no sabés que hacer porque toda tu vida, entendés, TODA, lo único que hiciste fue proyectar algo, un estilo de vida, ser una persona en la que no te pudiste convertir, y lo intentas, y no podes, y no podes, y etc. hasta que te rendís, y ahí viene la crisis existencial, porque claro, ¿qué hago ahora?. ¿como sigue esto?, tenés que rearmar de nuevo una estructura mental borrando por completo la otra anterior (que estaba en ruinas), desarraigarse a sí mismo para implantar a alguien nuevo, el problema es que ese alguien nuevo es como un recién llegado al mundo, alguien que no sabe a qué vino, no sabe lo que quiere, no sabe que es lo que le gusta hacer.
Por eso las palabras se nublan, porque la esencia se confunde, se pierde entre tanta mezcla de emociones, entre tantas sustancias y subjetividades.
Aunque si me pongo a hablar de la esencia humana debo reconocer que no es muy objetiva que digamos, es mas a todas las personas nos surge de adentro algo diferente, la "esencia", o sea la verdad, muchas veces esa verdad está formada por cosas incomprensibles, cómo explicar que a mí me gusta imaginar historias, cuentos, situaciones, cosas, y que eso es la parte mas sincera de mi esencia, cuál título objetivo se le puede poner a eso, ¿una imaginadora?, bueno yo seguí imaginando, porque no existe enfermedad, ni condición humana que pueda desapegar al ser de su propia esencia, sólo pueden nublarla y no dejar que se exprese, pero la esencia sigue ahí y no va a esperar mucho tiempo para volver a atacar, a devolverle la felicidad al alma que la porta.
Por eso las palabras nubladas igual pueden escribirse
porque la niebla es el descanso de la esencia, que se viste,
Por eso se reencuentran y se saludan los personajes
porque el autor nunca los mata, los ancla a su memoria
Por eso vuelven los castillos, los mil nombres y apellidos
porque mientras mas hambre haya mas deben jugar los niños

Terminamos sin saber qué íbamos a hacer, nos avasalla una simple sensación, la que, a su vez, es suficiente para barrer todo pensamiento objetivo que pueda haber aparecido.
Últimamente intento ponerle objetividad a mi vida para salir de una inmensa nube que se me atravesó hace un año, son esas cosas que parece que uno maneja, pero no, la mente. Un vertiginoso juego de sustancias que pueden hacer lo que quieren con uno, objetivamente son sólo sustancias, cosas químicas. Pero la vida real no es objetiva por lo tanto lo que parece que son simples sustancias, son enfermedades mentales, que duran hasta que se termina la sustancia, luego periódicamente vuelven a aparecer.
Y así mi vida se convirtió en una montaña rusa, inmanejable, irreconocible, a veces insostenible, saben a qué me refiero con que la vida puede ser insostenible.
Aunque el otro día busqué mejor y le llaman crisis existencial, cuando todo lo que creías, toda tu estructura mental se desmorona, de repente estas parada en el medio de la nada, no hay suelo, ni cielo, ni nada, muchas veces no hay aire.
Bueno eso es lo que estoy atravesando, no se si este post es un llamado a la solidaridad, lo que pasa es que siempre dije que para escribir hay que sentir y lo que siento es esto.
La crisis existencial se basa principalmente en la idea de no tener la mas puta idea de nada, o sea no sabes para qué hiciste lo que hiciste, ni por qué no pudiste hacer lo que querías, ni cómo salir de esto, ni a dónde te estás dirigiendo, resulta que de repente trabajaste toda tu vida para lograr algo que por alguna u otra manera no se dió y no sabés que hacer porque toda tu vida, entendés, TODA, lo único que hiciste fue proyectar algo, un estilo de vida, ser una persona en la que no te pudiste convertir, y lo intentas, y no podes, y no podes, y etc. hasta que te rendís, y ahí viene la crisis existencial, porque claro, ¿qué hago ahora?. ¿como sigue esto?, tenés que rearmar de nuevo una estructura mental borrando por completo la otra anterior (que estaba en ruinas), desarraigarse a sí mismo para implantar a alguien nuevo, el problema es que ese alguien nuevo es como un recién llegado al mundo, alguien que no sabe a qué vino, no sabe lo que quiere, no sabe que es lo que le gusta hacer.
Por eso las palabras se nublan, porque la esencia se confunde, se pierde entre tanta mezcla de emociones, entre tantas sustancias y subjetividades.
Aunque si me pongo a hablar de la esencia humana debo reconocer que no es muy objetiva que digamos, es mas a todas las personas nos surge de adentro algo diferente, la "esencia", o sea la verdad, muchas veces esa verdad está formada por cosas incomprensibles, cómo explicar que a mí me gusta imaginar historias, cuentos, situaciones, cosas, y que eso es la parte mas sincera de mi esencia, cuál título objetivo se le puede poner a eso, ¿una imaginadora?, bueno yo seguí imaginando, porque no existe enfermedad, ni condición humana que pueda desapegar al ser de su propia esencia, sólo pueden nublarla y no dejar que se exprese, pero la esencia sigue ahí y no va a esperar mucho tiempo para volver a atacar, a devolverle la felicidad al alma que la porta.
Por eso las palabras nubladas igual pueden escribirse
porque la niebla es el descanso de la esencia, que se viste,
Por eso se reencuentran y se saludan los personajes
porque el autor nunca los mata, los ancla a su memoria
Por eso vuelven los castillos, los mil nombres y apellidos
porque mientras mas hambre haya mas deben jugar los niños
