Te damos la bienvenida a la comunidad de T!Estás a un paso de acceder al mejor contenido, creado por personas como vos.

O iniciá sesión con
¿No tenés una cuenta?



Corría el año 1938 cuando Rust Heinz (miembro de la familia propietaria de las famosas salsas, entre otras cosas) y Maurie Schwartz presentaron el boceto de como pensaban que serían los automóviles del futuro. Y lo cierto, es que casi 80 años después sigue siendo un coche sorprendente por sus innovaciones y sus soluciones técnicas.

Bautizado como “The Phantom Corsair” (El Corsario Fantasma), el boceto fue exhibido por primera vez en 1938, dibujando un automóvil con una estructura basada en el Cord 810, posiblemente el chasis más avanzado de su época con un motor Lycoming de 4,7 litros y ocho cilindros, capaz de generar una velocidad máxima de 185 kilómetros por hora, que para la época era todo un record.


El diseño influenciado por el movimiento art decó, era de dos puertas y dos únicas ventanas, al uno y al otro lado, que le confieren un aspecto atractivo, con una figura limpia y estilizada con ciertas reminiscencias animales y que 70 años después sigue pareciendo la propia de un vehículo y un tiempo que aún está por llegar. No hay estribos ni defensas, y como curiosidad, la parte inferior del marco fue soldado con un tipo de acero llamado “chromoly”, mientras que la parte superior, con acero de aviación eléctricamente soldado. Gracias a esto, el vehículo tan solo pesa unas dos toneladas, una cifra mucho menor a la obtenida si en su construcción se hubieran utilizado materiales tradicionales.


Aunque se planificó su producción en serie, e incluso se le estimó un precio de 12.500 dólares de la época (una auténtica fortuna), Heinz falleció antes de que se terminará el primer y único vehículo que existe y que actualmente se exhibe en el Museo Nacional del Automóvil de Reno, en el estado de Nevada.

La fastuosidad de los interiores era otro de los rasgos característicos del Phantom Corsair. Tenía capacidad para seis personas en asientos tipo cama, las coberturas eran de corcho y goma para evitar lesiones en caso de accidentes e insonorizar la cabina y en el tablero completamente forrado en cuero llamaban la atención la cantidad de relojes indicadores (con altímetro, barómetro, economizador y nivel de aceite incluidos) que se extendían de lado a lado del mismo, e incluso tenía botones en el techo.

Los pasos de rueda iban totalmente carenados, por lo que para permitir el giro de las ruedas el automóvil tuvo que ser ensanchado generosamente, lo que le da un aspecto realmente impresionante, al ser muy ancho y muy bajo para la época.

Para que os hagáis una idea de lo avanzado del vehículo sólo unos datos:
- Su carrocería esta construida íntegramente en aluminio, algo que no se volvió a repetir en décadas.
- Su motor desarrollaba 190 Cv que unido a su aerodinámica le permite alcanzar los 185 Km/h
- Su diseño estaba inspirado en una manta raya, con unos pequeños abultamientos que ocultaban los faros y unas branquias de respiración en el capó, que recordaban a ese animal marino.
- Para mejorar la aerodinámica no tenía tiradores a la vista, abriéndose las puertas mediante un botón.
- Equipaba un sistema de climatización controlado por un termostato con el que se podía elegir la temperatura del habitáculo. Hasta casi 65 años después este sistema no ha sido una opción en los automóviles, siendo su uso limitado a los automóviles premium.
- Los cristales poseían un laminado especial y estaban tintados para ayudar a conservar la temperatura del interior.
- Contaba con dirección asistida y suspensión neumática.