Te damos la bienvenida a la comunidad de T!Estás a un paso de acceder al mejor contenido, creado por personas como vos.

O iniciá sesión con
¿No tenés una cuenta?
Voluntarios y docentes de la escuela Valdivieso de Malvinas Argentinas lanzaron un taller de alfabetización.



Desde la publicación de su primer libro de cuentos que llamó Bestiario, en 1951, los textos de Julio Cortázar llegaron a manos de lectores de todo el mundo. Entre ellos, se encuentra un grupo de niños de la humilde escuela Héctor Valdivieso de la localidad de Malvinas Argentinas, quienes a 100 años de su nacimiento realizaron un primer acercamiento a las obras del fallecido escritor argentino. A través de un taller de alfabetización, que incluye un gran desayuno, juegos y herramientas multimedia, docentes y voluntarios decidieron ayudar los sábados a los alumnos que presentan mayores problemas para leer y escribir.

“Doble tarea, pues: la de instruir, educar, y la de dar alas a los anhelos que existen, embrionarios, en toda conciencia naciente. El maestro se tiende hacia la inteligencia, hacia el espíritu y, finalmente, hacia la esencia moral que reposa en el ser humano. Enseña aquello que es exterior al niño; pero debe cumplir asimismo el hondo viaje hacia el interior de ese espíritu, y regresar de él trayendo, para maravilla de los ojos de su educando, la noción de bondad y la noción de belleza: ética y estética, elementos esenciales de la condición humana”, escribió Cortázar en 1939 en la Revista Argentina, una publicación mensual de los alumnos de la escuela Normal Dr. Chivilcoy.

Esa doble tarea de la que tanto conoce el escritor de su época de educador, la llevan a cabo en forma ardua los docentes de la escuela Valdivieso de Malvinas Argentinas, una institución privada que depende de la comunidad lasallana, destinada a niños que no tienen la posibilidad de acceder a otra institución educativa.

“Acá vienen los alumnos a comer con hambre”, describe la maestra de primer grado Ana Refrancore.