
El técnico interino de la selección de fútbol de Costa Rica, Paulo César Wanchope, aspira a una victoria en el amistoso de la próxima semana ante Uruguay para cerrar con broche de oro el año histórico para el deporte del país.
En una entrevista con ADN radio, Wanchope dijo que el duelo del 13 de noviembre en Montevideo ha despertado entusiasmo entre los jugadores ticos que esperan repetir la victoria que alcanzaron en el reciente Mundial Brasil-2014, donde Costa Rica ganó 3-1 a la celeste.
"Es un amistoso, pero con muchos factores emotivos (...) Lo que queremos es cerrar bien el año. Ha sido un año excelente, toda Costa Rica lo merece, lo merecen los jugadores, queremos empezar un nuevo ciclo de la mejor manera", comentó Wanchope, uno de los goleadores más representivo de los últimos años en Costa Rica.
El país centroamericano alcanzó marcas históricas en 2014 después de alcanzar los cuartos de final del Mundial de Brasil, tres clubes locales clasificaron a cuartos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf y la selección femenina clasificó por primera vez a un Mundial mayor.
Para el técnico hay un ambiente intenso previo al amistoso contra Uruguay, que ha sido visto como una revancha para los suramericanos, mientras que los costarricenses recuerdan su eliminación a manos uruguayas en el repechaje para el Mundial Sudáfrica-2010, al tiempo que será el regreso del ariete Luis Suárez a su selección.
"Es un partido en el que hay que controlar las emociones (...). Este será un partido en el que es muy sencillo motivar a los jugadores, todos quieren que llegue el día para jugar, hay que canalizar esa energía".
Dijo que "ojalá se pueda dominar de principio a fin. Si no es posible, jugar lo más inteligente posible para contrarrestar la fuerza de ellos".
Wanchope fue asistente técnico del colombiano Jorge Luis Pinto en el Mundial de Brasil y quedó como interino en el cargo mientras la federación local contrata un entrenador para dirigir al equipo con miras al Mundial Rusia-2018.

