Insisten en Inglaterra: Cristiano se quiere ir por que se dio cuenta que sin Di maria no es nada mas que humo y gel ya que nadie le da la pelota debajo del arco para que la empuje y se lleve todo el credito
Hoy le ha tocado al Sunday Express escribir el penúltimo capítulo del absurdo culebrón que pretende conseguir el regreso de Cristiano Ronaldo a la Premier League.
El diario británico Sunday Express explica hoy que Cristiano Ronaldo ha decidido marchar del Real Madrid para volver a Manchester. Así, porque sí. Según esa versión, el Real Madrid iría loco por percibir una cifra cercana a los 80 millones por su estrella. Sorprende que el Madrid pierda el sentido por esta cantidad después de haber "colocado" a Di María, que está a años luz del portugués, por 75 + 15 millones.
Las constantes informaciones que día tras día aparecen en los medios ingleses no tienen más fundamento que unas palabras pronunciadas recientemente por Cristiano Ronaldo en las que se mostraba agradecido al Manchester United, el club que fue su casa durante cinco años y le lanzó al estrellato, y que no le importaría volver algún día a esa ciudad, de la que guarda muy gratos recuerdos. De bien nacidos es ser agradecido. No hay más. Pero esa frase: "Me encanta Manchester, todo el mundo lo sabe. Llevo a Manchester en mi corazón", ha servido para poner en marcha la maquinaria de la especulación.
Curiosamente, el argumento del "agradecimiento" de Cristiano Ronaldo al United pierde consistencia cuando el mismo Sunday Express explica que Van Gaal, que está muy feliz con Di María, no lo quiere en su equipo. Y entonces lo fácil es tirar del recurso de siempre: el Manchester City, que va sobrado de dinero.
Pero da la casualidad de que ni Cristiano Ronaldo tiene interés alguno por cambiar el Real Madrid por el Manchester City, su rival de siempre en su época en la Premier, ni el Real Madrid tiene intención de vender a su estrella ni por 80, ni por 90 ni por 500 millones. A estas alturas de su trayectoria como presidente, Florentino Pérez no se va a poner nervioso por una oferta de 80 millones. Y menos dirigiendo un club con un presupuesto que supera los 650 millones.