Cristiano ronaldo ya esta emprendiendo su rumbo para su cuarto balon de oro y bota de oro, pues el tercer balon de oro ya lo tiene en el saco y es seguro se lo darán en enero.
Crisitano Ronaldo
13 goles liga
17 goles en lo que va de temporada
Messi
6 goles liga
7 goles en lo que va de temporada
En el peor momento posible y en el peor sitio posible. Allí estaba el Athletic, que no pudo disimular su estado. Los leones fueron devorados en el Santiago Bernabéu. No quedaron ni los huesos. Se anunciaban goles madridistas y se cumplieron todos los pronósticos. No hubo más por culpa de Iraizoz, que se mantuvo en pie a pesar de la estampida.
El himno de la Décima anunció el festival. Real Madrid y nada más. En el banquete no pudo faltar Cristiano Ronaldo, que se apuntó tres goles para sumar trece en seis partidos. Los otros dos los firmó Benzema con el nueve en el pecho.
CR llegaba entre algodones, pero todos sabíamos que estaba listo. Cómo no iba a estarlo. Si alguien dudaba de ello marcó muy pronto, a los tres minutos. Cristiano es el rey de la selva. Apareció por el segundo palo y el gol fue pan comido para un futbolista de su especie. Bale (con la pierna derecha) puso un buen centro y el portugués marcó con la cabeza.
Fútbol en el amplio sentido de la palabra
Entre el primero de Cristiano y el tanto de Benzema cerca del descanso pudieron llegar muchos más goles. El Madrid gobernó la noche sin demasiados problemas. El Athletic no aguantó el pulso. No estaba para eso. Tuvo muy poco el balón y tampoco buscó las cosquillas a los blancos a balón parado, donde la sombra de Aduriz fue muy alargada.
El Madrid funcionó muy bien en el amplio sentido de la palabra. No sólo a la carrera. Hubo combinaciones y pases milimétricos entre piernas enemigas. El equipo de Ancelotti no descansó ni según fueron llegando los goles.
Respondió Bale, más activo que de costumbre, algo que reclamaba el Bernabéu. Si el Madrid profundizó por la derecha, lo mismo pasó por el otro costado. Se bastó Marcelo, abajo y arriba, arriba y abajo. La melena del brasileño lució mucho más que la de los supuestos leones.
La fiesta continúa
Antes del descanso y después de unas cuantas paradas de Iraizoz, el gato soltó el zarpazo a la salida de un córner. Marcó de cabeza. Van dos noches seguidas metiendo los goles que dicen que le corresponde aunque haga mucho más que eso.
Sergio Ramos se quedó en la caseta por unas molestias en el sóleo. Entró Varane y siguió el festival. Otro de Cristiano, otro de Benzema. Iraizoz impidió muchos más en plena vorágine de fútbol madridista, pero no evitó el tercero y último de CR. No sabemos ni cómo marcó. Menudo bicho.
Crisitano Ronaldo
13 goles liga
17 goles en lo que va de temporada
Messi
6 goles liga
7 goles en lo que va de temporada
En el peor momento posible y en el peor sitio posible. Allí estaba el Athletic, que no pudo disimular su estado. Los leones fueron devorados en el Santiago Bernabéu. No quedaron ni los huesos. Se anunciaban goles madridistas y se cumplieron todos los pronósticos. No hubo más por culpa de Iraizoz, que se mantuvo en pie a pesar de la estampida.
El himno de la Décima anunció el festival. Real Madrid y nada más. En el banquete no pudo faltar Cristiano Ronaldo, que se apuntó tres goles para sumar trece en seis partidos. Los otros dos los firmó Benzema con el nueve en el pecho.
CR llegaba entre algodones, pero todos sabíamos que estaba listo. Cómo no iba a estarlo. Si alguien dudaba de ello marcó muy pronto, a los tres minutos. Cristiano es el rey de la selva. Apareció por el segundo palo y el gol fue pan comido para un futbolista de su especie. Bale (con la pierna derecha) puso un buen centro y el portugués marcó con la cabeza.
Fútbol en el amplio sentido de la palabra
Entre el primero de Cristiano y el tanto de Benzema cerca del descanso pudieron llegar muchos más goles. El Madrid gobernó la noche sin demasiados problemas. El Athletic no aguantó el pulso. No estaba para eso. Tuvo muy poco el balón y tampoco buscó las cosquillas a los blancos a balón parado, donde la sombra de Aduriz fue muy alargada.
El Madrid funcionó muy bien en el amplio sentido de la palabra. No sólo a la carrera. Hubo combinaciones y pases milimétricos entre piernas enemigas. El equipo de Ancelotti no descansó ni según fueron llegando los goles.
Respondió Bale, más activo que de costumbre, algo que reclamaba el Bernabéu. Si el Madrid profundizó por la derecha, lo mismo pasó por el otro costado. Se bastó Marcelo, abajo y arriba, arriba y abajo. La melena del brasileño lució mucho más que la de los supuestos leones.
La fiesta continúa
Antes del descanso y después de unas cuantas paradas de Iraizoz, el gato soltó el zarpazo a la salida de un córner. Marcó de cabeza. Van dos noches seguidas metiendo los goles que dicen que le corresponde aunque haga mucho más que eso.
Sergio Ramos se quedó en la caseta por unas molestias en el sóleo. Entró Varane y siguió el festival. Otro de Cristiano, otro de Benzema. Iraizoz impidió muchos más en plena vorágine de fútbol madridista, pero no evitó el tercero y último de CR. No sabemos ni cómo marcó. Menudo bicho.