EN ALGUN LUGAR DE ESPAÑA...
El Real Madrid sumó su primera derrota en la Liga tras caer derrotado frente a la Real Sociedad que remontó el 0-2 inicial para terminar goleando 4-2 al conjunto blanco.
Algunos espectadores no habían tomado en Anoeta cuando el Madrid se adelantó a los cinco minutos de juego con un gol de Sergio Ramos de cabeza luego de un tiro de esquina.
El Real Madrid estaba lanzado en ataque teniendo al conjunto vasco arrinconado en su campo. Así, a los 10' apareció Gareth Bale. El futbolista galés tras una buena acción personal, en el que le hizo un túnel a un rival, remató de pierna izquierda y marcó el 2-0 parcial..
La Real ni estaba ni se le esperaba y así el conjunto de Carlo Ancelotti prácticamente se entrenaba con público y llegaba cuando quería a los dominios del equipo realista, que volvió a sufrir tras un grave error de De la Bella que terminó con una clara ocasión de gol de Marcelo.
Con la ventaja, el Real Madrid se durmió y cerca del descanso llegó el gol realista tras un córner y aprovechar la pasividad defensiva blanca, hoy de rosa, para que Iñigo Martínez marcara el 1-2.
El sueño del Real Madrid era muy profundo y nadie en el campo ni en el banquillo era capaz de despertarlo de su letargo, lo que aprovechó la Real para empatar el choque con una gran cabezazo de Zurutuza a centro de De la Bella y resucitar el partido.
No sonó tampoco el despertador en el vestuario blanco porque en la primera jugada de la segunda mitad se salvó de encajar el tercero, cuando Agirretxe en posición inmejorable cabeceó errático un centro de Xabi Prieto.
Entraron Sergio Canales y Carlos Vela para ir por el partido al comprobar que el Real Madrid se había descompuesto y en el minuto 65 se consumó con una acción de jugones del cántabro y Xabi Prieto que puso el balón en la boca de gol para que Zurutuza marcara el tercero.
El público quería más y la Real estaba dispuesta a dárselo porque su rival no daba pie con bola, de forma que en el tramo final llegó el cuarto en una jugada de pillo de Carlos Vela que levantó el estadio.
Khedira y Benzema en los últimos instantes tuvieron la opción de haber dado vida a su equipo con sendas oportunidades claras de gol pero la pólvora mojada de ambos permitió darse un gran homenaje a la afición de Anoeta.
EN CANCHA DE INDEPENDIENTE
Independiente es la felicidad en Avellaneda. Sí, el Rojo se quedó con el primer clásico ante Racing desde su regreso a Primera. Después de arrancar perdiendo con gol de Milito, en una ráfaga lo dio vuelta con gritos de Penco y Mancuello. Un triunfo para celebrar. Rapallini, flojo.
Los clásicos se ganan, dicen. Y eso fue lo que hizo Independiente frente a Racing: ganó. Y el mérito no fue sólo el hecho de haber cosechado el triunfo, además tuvo la fuerza de reponerse de ese gol de Diego Milito y en una ráfaga de dos minutos pasó de perder 1-0 a conseguir una victoria 2-1 gracias a los tantos de Penco y de Mancuello. Y la diferencia en el derby de Avellaneda no pasó una cuestión de actitud, coraje o valentía, si no de juego. Ojo, los de Almirón no representaron el paladar histórico de sus hinchas, pero con poco le alcanzó para ser más que sus primeros. Y sacó -mucha- ventaja en las pelotas paradas. Ese fue el fuerte de uno y la debilidad del otro. Párrafo aparte para el arbitraje de Rapallini...
Racing fue el primero en hacerse protagonista del partido. Independiente le cedió la pelota y lo esperó. Ahí fue que Centurión desbordó por izquierda, asistió a Milito en el área chica (Tula dio el paso adelante y quedó expuesto) y el Príncipe le dio un pase a la red. Letal. El Rojo empezó a adelantarse y fue a buscar. ¿Cómo? Con pelota parada, primero: centro pasado de Mancuello, la defensa se quedo mirando y Penco apareció por atrás, solito, para poner el 1-1. Segundos después, el Rolfi mete un centro al corazón del área, mala salida de Saja, anticipo de Mancuello para dar vuelta el resultado.
Con la ventaja, lo que hizo Independiente fue defenderla con uñas y dientes. Quizá hasta regalando mucha cancha y y arriesgando por demás, pero la apuesta le salió bien. Y apeló a la pelota quita para atacar a Racing. Tiro libre de Mancuello, salvó Saja. Cabezazo de Tula, salvó Saja. Testazo de cuesta, salvó Saja. ¿Qué hacía Racing? Cuando pasó el sofocón, fue por el empate. Pero con la salida de Milito, el equipo de Cocca se quedó sin presencia en el áea. Perdió a su referencia (flojito Bou, su reemplazante). Perdió vértigo, también. No tuvo un tipo que elaborara, que fuera la gestación de juego. La academia atacaba pero a los tumbos. Haciendo lo que podía como podía. Racing se desmoronó cuando se fue Milito.
Independiente no fue una maravilla. Pero logró ser más astuto en las dos áreas. Por eso ganó y festeja. Por eso se quedó con el primer clásico de Avellaneda en su vuelta a Primera y lo celebra al Rojo vivo.


MIENTRAS TANTO EN LA BOMBONERA...
Boca Juniors, que puso fin al ciclo de Carlos Bianchi como DT luego de hilvanar su tercera derrota en cuatro partidos, y lo reemplazó con un hijo pródigo, el "Vasco" Rodolfo Arruabarrena, venció esta tarde 3-1 a Vélez, que llegaba como líder e invicto del torneo de Primera División con puntaje ideal.
Correa, en el final del primer tiempo, abrió la cuenta para la visita; "Cata" Díaz lo igualó en el complemento, César Meli lo dio vuelta y Andrés Chávez puso el tercero.
El encuentro, válido por la 5ta. fecha, se jugó en 'La Bombonera', fue arbitrado por Patricio Loustau y lo transmitió la Televisión Pública y DeporTV.
Boca tiene ahora 6 puntos en el torneo, merced también a la agónica victoria sobre Belgrano de Córdoba (1-0). Vélez mantuvo los 12.

