James vuelve a enfrentarse a Neymar
Neymar es el principal peligro de una ‘canarinha’ en construcción que puede sellar su clasificación ante un rival con más estrellas
Esto no es un Barça-Madrid, es un Brasil-Colombia”. Aunque Neymar haya querido ser políticamente correcto ante la prensa de su país, el encuentro de Copa América de esta próxima madrugada tiene unas claras connotaciones de Clásico. La rivalidad está servida en el duelo particular entre Neymar y James Rodríguez, los ‘10’ y jugadores franquicias de sus respectivas selecciones. El choque es clave, principalmente para los colombianos. Tras la debacle contra Venezuela (1-0), si el equipo de José Pekerman pincha, James, Falcao, Cuadrado, Bacca y compañía pueden ir preparando las maletas para volver a casa.
Toda América Latina estará pendiente del Neymar vs James, un enfrentamiento que escenifica a la perfección el presente de sus respectivos clubs. El Mohicano, con el triplete bajo el brazo, sigue creciendo a pasos agigantados. Capitanea y dirige la Seleçao y, en su país, ya lo postulan como finalista al Balón de Oro 2015. Ney es ahora mismo magia y alegría. Es feliz y pasa por un momento dulce. Fue elegido el mejor jugador de la jornada inaugural de la Copa América donde marcó y dio la asistencia en tiempo de descuento a Douglas Costa que significó el 2-1 contra Perú. El blaugrana responde a las expectativas, con goles, autoridad y galones.
James, por su lado, es el galáctico perfecto. Tiene presencia, calidad y tirón publicitario en un mercado, como el colombiano, muy apetitoso para los negocios de la compañía de Florentino Pérez. A la hora de la verdad, sin embargo, no da la talla. El Madrid pagó 80 kilos, tras ser el pichichi del Mundial, pero, en aquel torneo, en el partido de su vida, el Brasil-Colombia de los cuartos de final, ni se le vio y su selección fue eliminada. En la hora H, James no es un fuera de serie, ya sea con Colombia o con el Madrid. Neymar, en cambio, está dejando sus marcas en las grandes citas.
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En la Copa América, el madridista, como el resto de sus compañeros, decepcionó contra Venezuela. En su país, le cayeron palos. Ahora está contra las cuerdas. James apeló a “la mística y a la unidad”, del grupo para intentar ganar un encuentro que prevé que “será mucho más abierto y con espacios”.
Brasil está en fase de construcción, como el mismo Dunga ha reconocido. “Ahora mismo no somos candidatos al título, pero lo podemos ser a medida que pase la competición”, asegura.
La canarinha puede estar huérfana de cracks, pero los encuentros contra rivales de clase media los sabe resolver. Esta madrugada, Dunga apostará por el mismo equipo que venció a Perú, con Dani Alves, muy elogiado por el técnico, en el lateral derecho, y con Diego Tardelli, Fred (Shakhtar) y Willian como compañeros de ataque de Ney.