EN EL CENTENARIO
Expreso tricolor
Nacional salió a defender ante Fénix la diferencia en la tabla de posiciones y al minuto de juego abrió el marcador con tanto de Gastón Pereiro. Ya sobre el final, Iván Alonso y Sebastián Fernández decoraron el marcador con el 3-0 final, más abultado de lo que el trámite del juego mostró.
Expreso tricolor
Nacional salió a defender ante Fénix la diferencia en la tabla de posiciones y al minuto de juego abrió el marcador con tanto de Gastón Pereiro. Ya sobre el final, Iván Alonso y Sebastián Fernández decoraron el marcador con el 3-0 final, más abultado de lo que el trámite del juego mostró.

Los dos grandes juegan los partidos previos a los clásicos, cualquiera sea su posición en la tabla, para ganarlos. Eso es claro. Aunque en el subconciente de ambos también está latente el deseo -y/o la premisa- de zafar; esto es: ganar sí, pero además sin sufrir contratiempos como expulsiones o lesiones.
Debe ser por eso entonces que Nacional le ganó a Fénix -bien, aun cuando el resultado hasta poco antes del final fue apretado- en un partido de trámite “light”, por momentos lento, de a ratos liviano, que salvo ráfagas en las que el conjunto de Capurro inquietó con pases metidos en profundidad y de contraataque se pareció mucho a una intensa práctica; o casi.
Por supuesto, el gol rápido de Pereiro condicionó ese trámite tibio, porque Nacional no se sintió urgido de triunfar, sólo apretó el acelerador en un par de desbordes por izquierda como el que generó la apertura del score y en otras tantas llegadas generadas por la presión alta que ejerció Arismendi en tres cuartos de cancha, y Fénix se rearmó, se repuso de ese golpe anímico que se llevó de entrada y creció, pero como Ligüera no gravitó en la medida de sus posibilidades y fue controlado por la zaga tricolor, el equipo albivioleta careció de peso en el área contraria.
Así, entonces, con orden, aplomo y notoria confianza por lo que era su funcionamiento sobrio y sin grietas adentro de la cancha, Nacional fue como dejando correr el partido, seguro de que cumpliría con el primer (y básico) objetivo de un grande previo al clásico: ganar.
Salvo el caso de Polenta, que cerró en un par de situciones inquietantes, y de Arismendi que empezó jugando en forma dominante y luego se fue entreverando, en el conjunto tricolor no hubo actuaciones explosivas, descollantes, ni siquiera jugadores que -tal vez por aquello de cuidarse para el compromiso contra el tradicional adversario- imprimieran (como es el caso de De Pena, por ejemplo) la dinámica y revoluciones de otras oportunidades.
Eso, incluso, permitió que Fénix descubriera algunos espacios en la retaguardia contraria; pero entre Munúa, Polenta, y sus propias limitaciones, como que sus futbolistas se resbalaron en forma reiterada, el cuadro dirigido por Gustavo Bueno no pudo ni supo capitalizar esas brechas que fabricó y que para Nacional deben haber sido un toque de atención con la vista puesta en el próximo fin de semana.
Quedó la sensación de que, además de ganar y de hacerlo en forma apretada hasta que Fénix se animó a ir buscar el empate, abrió la guardia y el conjunto tricolor lo “remató” de contragolpe en los minutos finales, Nacional zafó. Sin opulencia, pero bien: no tuvo expulsados ni lesionados, Munúa estiró a 653’ el invicto de su arco y, por si fuera poco, de yapa, Alonso secó la pólvora y hasta metió un gol “Papelito” Fernández. ¿Qué más se puede pedir? Eso que se fue cantando la hinchada: ganarle a Peñarol, claro.
FÉNIX 0-3 NACIONAL
Estadio: Centenario
Árbitro: D. Ubriaco. Asistentes: G. Popovits y S. Freire.
Fénix: L. Mejía; J. Álvez, I. Pallas, F. Silva; A. Gabrielli, A. Schettino (63' J. Zambrana), O. Ferro, S. Dorrego (45' F. Boné); M. Ligüera, A. Hernández; y F. Acosta (78' C. Waterman). DT: G. Bueno.
Nacional: G. Munúa; S. Romero, R. García, D. Polenta, A. Espino; D. Arismendi, G Porras; H. Giménez (65' S. Fernández), G. Pereiro (80' M. Calzada), C. De Pena; e I. Alonso. DT: A. Gutiérrez.
Gol: 1' G. Pereiro (N), 88' I. Alonso (N), S. Fernández (N).
Amarillas: F. Acosta (F), A. Hernández (F), D. Polenta (N).