Regreso de Rodrigo Palacio al Inter significo una goleada y el regreso de la mufa.
Inter sufrió una derrota inesperada y humillante. Como local cayó 4-1 contra Cagliari, que llegaba como último de la Serie A. El conjunto de Walter Mazzarri mostró muchas fallas en defensa y poco juego en ataque.
Casi como una presunción de lo que sería el resto del encuentro, el partido comenzó torcido para el Inter de Palacio y Osvaldo, ya que a los 10 minutos de la primera mitad Sau puso el primer gol con un remate junto a un palo y silenció el estadio.
A partir de eso, el local salió con todo en busca del empate y en una ‘avivada’ de Rodrigo Palacio ocho minutos después, encontró la igualdad. El ex Boca jugó rápido un tiro libre y el ítalo-argentino Daniel Osvaldo puso el 1-1 que trajo algo de alivio, aunque lamentablemente para Inter duró poco. Fue expulsado Nagatomo por doble amarilla y tan solo 11 minutos después, el conjunto visitante, que llegó como último con un punto sobre 12 posibles a este partido, aprovechó los espacios que dejaron los de Walter Mazzarri en la desesperación y entre los 29’ y 34’, Ekdal definió dos veces en el área chica de Inter y puso el 3-1.
Pasó todo muy rápido, el golpe se sintió en Milán y Cagliari se agrandó. Correcto en defensa y saliendo bien por los costados continuó generando peligro y antes que termine el primer tiempo pudo haber puesto el cuarto de penal, pero Handanovic le atajó el remate a Andrea Cossu. Parecía que el local ‘resucitaba’ por el envión anímico pero no fue así. En el tiro de esquina siguiente volvió a pagar por sus errores defensivos y Ekdal marcó el cuarto, el tercero suyo en el partido, y sentenció el encuentro.
En la segunda parte se cortó con todo el vértigo que dio los primeros 45’ y pasó prácticamente nada. Inter intentó descontar para soñar con el milagro aunque no ocurrió. Tuvo algunas situaciones aisladas con Palacio y Osvaldo, luego con Icardi que entró por el primero de ellos, pero jamás pudo penetrar la dura defensa visitante que aguantó bien y volvió a ganar en el Meazza después de 19 años. Con esta derrota, el local quedó con ocho puntos, muy lejos de los líderes Juventus y Roma, mientras que Cagliari salió de la última posición.
Casi como una presunción de lo que sería el resto del encuentro, el partido comenzó torcido para el Inter de Palacio y Osvaldo, ya que a los 10 minutos de la primera mitad Sau puso el primer gol con un remate junto a un palo y silenció el estadio.
A partir de eso, el local salió con todo en busca del empate y en una ‘avivada’ de Rodrigo Palacio ocho minutos después, encontró la igualdad. El ex Boca jugó rápido un tiro libre y el ítalo-argentino Daniel Osvaldo puso el 1-1 que trajo algo de alivio, aunque lamentablemente para Inter duró poco. Fue expulsado Nagatomo por doble amarilla y tan solo 11 minutos después, el conjunto visitante, que llegó como último con un punto sobre 12 posibles a este partido, aprovechó los espacios que dejaron los de Walter Mazzarri en la desesperación y entre los 29’ y 34’, Ekdal definió dos veces en el área chica de Inter y puso el 3-1.
Pasó todo muy rápido, el golpe se sintió en Milán y Cagliari se agrandó. Correcto en defensa y saliendo bien por los costados continuó generando peligro y antes que termine el primer tiempo pudo haber puesto el cuarto de penal, pero Handanovic le atajó el remate a Andrea Cossu. Parecía que el local ‘resucitaba’ por el envión anímico pero no fue así. En el tiro de esquina siguiente volvió a pagar por sus errores defensivos y Ekdal marcó el cuarto, el tercero suyo en el partido, y sentenció el encuentro.
En la segunda parte se cortó con todo el vértigo que dio los primeros 45’ y pasó prácticamente nada. Inter intentó descontar para soñar con el milagro aunque no ocurrió. Tuvo algunas situaciones aisladas con Palacio y Osvaldo, luego con Icardi que entró por el primero de ellos, pero jamás pudo penetrar la dura defensa visitante que aguantó bien y volvió a ganar en el Meazza después de 19 años. Con esta derrota, el local quedó con ocho puntos, muy lejos de los líderes Juventus y Roma, mientras que Cagliari salió de la última posición.
