Barovero se lució con dos tapadas contra Godoy Cruz y completó su décimo partido consecutivo en el Monumental sin recibir goles. Un pilar fundamental de este River arrollador.
River tiene un arquero de Selección. Marcelo Barovero supo ganarse al hincha incluso en semestres no tan buenos y, en el arranque arrollador del equipo de Marcelo Gallardo, se transformó en un punto fundamental del campeón.
Anoche, contra Godoy Cruz, Trapito le sacó dos mano a mano a Rubén Ramírez -el primero, con el partido 0 a 0- y mantuvo su valla invicta una vez más. Pero no fue una noche cualquiera, porque redondeó diez partidos consecutivos sin recibir goles en el Monumental.
Casualmente, el último equipo que le marcó fue Godoy Cruz, en la tercera fecha del Torneo Final (derrota por 2 a 1). De allí en más, a River sólo le metió goles Racing en el recordado 3 a 2, pero aquella noche atajó Leandro Chichizola.
San Lorenzo, Arsenal, Lanús, Newell's, Rafaela, Quilmes, Central, Defensa, Tigre y Godoy Cruz intentaron vulnerar a Barovero, pero nadie pudo. Ayudado por una defensa cada vez más sólida, el mejor arquero del país achicó el arco más grande del mundo.
Pero hay más: Trapito atajó 81 veces con La Banda y en 42 de ellos mantuvo su valla en cero. Sí, en más de la mitad de los encuentros que jugó Barovero, a River no le metieron goles. Un crack que, con su perfil bajo, se hizo enorme.