El aborto no es una opcion !

Marilyn Ramírez y Nelson Vásquez son un matrimonio joven. Ella es Educadora de Párvulos de profesión y él Geógrafo, mientras que la pequeña Olivia Pía es su esperada primera hija. Tanto querían ser padres, que Marilyn decidió preparar su cuerpo con anterioridad para recibir al ángel que vendría a unir sus vidas, y bajo consejo médico comenzó a tomar ácido fólico tres meses antes de quedar embarazada. Por lo mismo, nunca se le pasó por la cabeza que la criatura que cargaba en su vientre podía llegar a presentar Espina Bífida Abierta, enfermedad que en gran parte de los casos se presenta por deficiencia de ácido fólico en la madre.

El diagnóstico llegó a las 21 semanas, durante una ecografía de control. El Mielomeningocele que padecía Olivia era de los más graves y a medida que avanzaba el embarazo le produciría serios daños neuronales, entre ellos, hidrocefalia, parálisis total o parcial de las extremidades inferiores, incontinencia urinaria y fecal y discapacidad intelectual. La noticia fue un gran impacto para sus padres, sin embargo Marilyn recordó que para una Teletón había visto una entrevista a los papás de una niña con la misma patología, a quien habían operado antes de nacer para evitar gran cantidad de los problemas que acarrea esta enfermedad. Se trataba de Ema Ackerman, una bebé nacida en 2012 a quien se le practicó la primera cirugía intrauterina en Chile.

Con eso en mente, plantearon la opción a sus médicos de la Clínica Indisa. Sin embargo, ellos intentaron apagar su esperanza, señalando que era un procedimiento experimental, muy peligroso, y que ellos no lo realizaban, que la única opción existente era operar a Olivia una vez que naciera para cerrar su espina, pero que el daño a esa altura ya estaría hecho.

A pesar de lo lapidario del diagnóstico entregado, Marilyn y Nelson no se permitieron flaquear, su hija los necesitaba en ese minuto más que nunca, por lo que no había tiempo para llantos ni cuestionamientos. Si querían hacer algo por su pequeña debía ser rápido, así que siguieron su instinto y se pusieron en manos del equipo médico de la Clínica Las Condes, el único centro de salud que realiza este tipo de intervenciones en nuestro país.


Sabían que no iba a ser fácil, que aparte de las complicaciones médicas, iban a enfrentar complicaciones económicas, porque su plan de salud era cerrado con la Clínica Indisa, pero pensaron que al tratarse de una cirugía que allí no se realizaba, Isapre Cruz Blanca admitiría la excepción. No podían estar más equivocados, la isapre no solo rechazó la intervención en otro centro médico, sino cualquiera que se hiciera anterior al nacimiento de la menor, pues según alegaron, la beneficiaria del plan era la madre y no la bebé que estaba por nacer.

Sin importarles esta decisión, los Vásquez Ramírez siguieron adelante con los pasos para la operación, y a la semana 23 de embarazo, Marilyn ingresó a pabellón. Fueron en total cinco horas de cirugía, donde a la pequeña Olivia le cerraron su médula espinal, en un exitoso procedimiento.

“Siempre tuvimos la esperanza de que la cirugía fuera exitosa. Sabíamos que había muchos riesgos, tanto para ella, como para mí, pero teníamos que hacerlo, era una oportunidad de darle una mejor calidad de vida. Su enfermedad ya estaba y no iba a desaparecer, pero cada condición de esta que pudiera mejorar iba a ser un gran avance”, cuenta Marilyn.

Mientras ella se recuperaba en su casa, e intentaba llevar su embarazo lo más avanzado que se pudiera, su marido se dedicó a hacer los trámites de la isapre, e intentar activar el seguro catastrófico, pero todas las gestiones fueron rechazadas, por lo que decidieron contratar al abogado especialista Pedro Barría y exigir la cobertura por la vía judicial.



Nacimiento

Olivia nació el pasado 7 de enero, con 33 semanas de gestación, y una grave cardiopatía llamada Tetralogía de Fallot, que no había sido detectada previamente. No obstante, antes de cumplir el mes de vida fue dada de alta, y desde entonces lucha día a día junto a sus padres por superar las condiciones de su enfermedad. Se le operó por el pie boot que presentó, y se le trató por una luxación de caderas con la que nació. Actualmente se la trata con fármacos por su problema cardiaco, y esperan posponer lo más posible la cirugía que necesita, mientras que a diario se somete a sesiones de kinesiología y terapia ocupacional.

A pesar de todo ello, sus padres agradecen el estado de salud en que se encuentra su hija, ya que gracias a la microcirugía intrauterina, no presenta paraplejia, hidrocefalia ni otras severas e irreversibles patologías asociadas a la Espina Bífida Abierta, lo que complicaría mucho más su situación.

“Ha sido un periodo de mucha lucha, de muchos exámenes, controles, terapias, rehabilitación… harto sacrificio, pero con mucha recompensa, muchos logros de parte de ella, y eso para nosotros es invaluable”, asegura Marilyn.

esto no es para mi , NO ESTOY PREPARADO