

EL PERFIL DE UNA MALTRATADORA
• Utiliza la violencia con el fin de doblegar la voluntad de la víctima.
• Los ejes en que basa los abusos domésticos vienen determinados por la edad , el género y la legislación que las ampara.
• No es enferma mental, aunque lo parece. No da puntada sin hilo.
• Selecciona a la víctima y escoge el lugar del ataque.
• Tiene actitudes sexistas y creencias estereotipadas de las mujeres. Su bula hacia el maltrato la hace más fuerte.
• Ve amenazado permanentemente su poder en el ámbito familiar. Si no se hace lo que ella quiera, como ella quiera y cuando ella quiera montará en cólera.
• Impone el aislamiento social de su entorno familiar, como estrategia para romper la independencia y autoestima de su pareja. La imposición de aislamiento en no pocas ocasiones va más allá de lo psicológico y pasa a la inmovilidad física, dándose situaciones de secuestro en el propio hogar.
• Critica constantemente con el ánimo de crear inseguridad y fomentar la dependencia.
• No asume la responsabilidad de sus actos violentos ni considera el problema como propio.
• Tiene una gran capacidad de persuasión. Con extraños utiliza la seducción para imponer sus criterios.
• Racionaliza su conducta violenta, la justifica y minimiza.
• Utiliza todo tipo de estrategias para lograr un único fin: que al hombre no se le ocurra marcharse. Para ello, no duda en amenazarle con denunciarle, con no ver a sus hijos y quedarse con todo. Literalmente dicen " Si estás aquí es porque yo quiero, me basta una llamada para que te pongan de patitas en la calle"
• Atribuye el problema a la propia conducta de la víctima, a la familia, el trabajo, la situación socioeconómica.
• Representa una imagen social opuesta a la que tiene en el ámbito privado.
• Fuera de casa puede ser educada, alegre, amable, seductora, solidaria, atenta, respetuosa, mártir y mujer amantísima.
• Una de sus estrategias es la de convencer al hombre de que no puede vivir sin ella, cuando en realidad es ella quien depende "funcionalmente" de él.
• Manipula al compañero ejerciendo el control sobre los bienes materiales.
• Utiliza las visitas a sus hijos para acercarse a su víctima y seguir maltratándole.
• Tiende a manipular e intenta seducir a los profesionales con su juego de doble fachada.
• Entiende su equilibrio emocional como control absoluto del otro.
• Siempre pide una segunda oportunidad.
• Esgrime los celos para invadir y controlar la vida del hombre.
• Tiene generalmente antecedentes de violencia en su familia de origen.
• Repetirá su conducta violenta en las sucesivas relaciones que mantenga con otros hombres
• Finalmente denuncian por maltrato: el invento se les da bien, actúan perfectamente ante las autoridades pertinentes, las cuales ponen enseguida el protocolo en marcha.
• Si tienes hijos, su acoso no cesa jamás: te insultará delante de ellos, pero dirán que no. No te enterarás de nada de lo que les sucede en su vida, intentará ponerlos en tu contra, hará todo lo posible para que no mantengas con ellos una relación parental, te volverá a acusar de maltratador, de pederasta, de lo que haga falta…Su cinismo no tiene límites.


Sus estrategias defensivas.
Las estrategias defensivas utilizadas por el agresora consiguen un resultado excelente al trasladar la responsabilidad de la agresión a la víctima, provocando una doble victimización cuando afirma que ha sido maltratada, que está loco , que tiene una visión distorsionada de la realidad.

Fundamentan.
Racionaliza los ataques de forma que parezca que está bien lo que hizo.
Minimizan Resta importancia a la agresión para conseguir distanciarse del daño causado, argumentando que éste no ha sido tan grave, que podía haber sido peor, haber hecho más daño pero no ha querido, eso parece ser que la convierte en "buena".
Desvían el problema Suele achacar su comportamiento a la falta o exceso de trabajo, el exceso en los gastos, a que te dejas la luz encendida, a que no sabes tender bien la ropa, a que prefieres ir con los niños al parque antes que quitar la grasa del suelo de la cocina con un cuchillo etc.
Con este mecanismo trasladan la responsabilidad a cuestiones ajenas a sí mismas.

Olvidan.
Asegura que no recuerdan, que no son conscientes de lo que se les recrimina.
Niegan abiertamente los ataques utilizando como defensa este mecanismo para restar credibilidad al relato de la víctima.

Racionalizan.
Explica coherentemente conductas y hechos. La explicación real y la motivación de las mismas no serían admitidas por la instancia moral de la personalidad si el entorno social no admitiese esos comportamientos como legítimos.

Proyectan.
Atribuye a la víctima la responsabilidad de las conductas violentas.




