1. Constantemente te estás tropezando, cayendo, golpeando, y tirando cosas al suelo.
2. Y como tus amigos esperan esto de ti, siempre tienen listas sus cámaras.
3. Los momentos más importantes de tu vida han sido arruinados y convertidos en memes para que nunca puedas olvidarlos.
4. El solo pensar en usar ropa formal no te deja dormir en la noche.
Nope. Nope. Nope. Nope.
6. Te asustan las alturas porque sabes que eres capaz de caerte de un edificio.
7. Tu calzado siempre se desarma porque francamente no sabes caminar correctamente.
8. Eres un experto en primeros auxilios y siempre llevas lo necesario contigo.
9. Los pisos mojados son tus enemigos mortales.
Entiendo tu dolor, hombre PRECAUCIÓN.
10. No tienes ni un poco de miedo a la sangre.
11. “Casi” has muerto varias veces.
12. Todavía corres como un demente.
13. Tus amigos ya no se preocupan por tus heridas y se lo toman con calma.
14. Tu falta total de gracia es sorprendente y muy chistosa.
15. Tienes las más graciosas y bochornosas historias de tu infancia.
¿Te acuerdas cuando te caíste de un vehículo en movimiento (y sobreviviste, obvio)? ¡Esa comedia es LA MEJOR!
16. Constantemente se te caen cosas, como teléfonos y bebés.
Y futuros líderes del reino animal.
17. Las personas tienen miedo de estar cerca tuyo porque temen sufrir heridas no intencionales.
18. Nunca hay un momento aburrido cuando estás tú.
Esto es como una película de Jim Carrey.
19. Ya has aceptado tu situación y honestamente puedes reírte de ti mismo.
20. Practicas caminar en tu habitación para prevenir futuros problemas.
21. Las personas siempre intentan rescatarte, y a veces tienes suerte.
“ESCUCHA AMIGO, puedo cuidarme yo sol— oh estoy tan lastimado que no puedo caminar”.
22. Dices, “¡Estoy bien! y, “Confía en mí, no me pasó nada” todo el tiempo.
23. Eres muy bueno para recuperarte rápidamente.
Es decir, ya casi no te das cuenta.
24. ¡Porque todas esas heridas te han hecho súper fuerte!
25. Y estás orgulloso de tus cicatrices de guerra porque casi todas vienen con una buena historia.

2. Y como tus amigos esperan esto de ti, siempre tienen listas sus cámaras.

3. Los momentos más importantes de tu vida han sido arruinados y convertidos en memes para que nunca puedas olvidarlos.

4. El solo pensar en usar ropa formal no te deja dormir en la noche.

Nope. Nope. Nope. Nope.
6. Te asustan las alturas porque sabes que eres capaz de caerte de un edificio.

7. Tu calzado siempre se desarma porque francamente no sabes caminar correctamente.

8. Eres un experto en primeros auxilios y siempre llevas lo necesario contigo.

9. Los pisos mojados son tus enemigos mortales.

Entiendo tu dolor, hombre PRECAUCIÓN.
10. No tienes ni un poco de miedo a la sangre.

11. “Casi” has muerto varias veces.

12. Todavía corres como un demente.

13. Tus amigos ya no se preocupan por tus heridas y se lo toman con calma.

14. Tu falta total de gracia es sorprendente y muy chistosa.

15. Tienes las más graciosas y bochornosas historias de tu infancia.

¿Te acuerdas cuando te caíste de un vehículo en movimiento (y sobreviviste, obvio)? ¡Esa comedia es LA MEJOR!
16. Constantemente se te caen cosas, como teléfonos y bebés.

Y futuros líderes del reino animal.
17. Las personas tienen miedo de estar cerca tuyo porque temen sufrir heridas no intencionales.

18. Nunca hay un momento aburrido cuando estás tú.

Esto es como una película de Jim Carrey.
19. Ya has aceptado tu situación y honestamente puedes reírte de ti mismo.

20. Practicas caminar en tu habitación para prevenir futuros problemas.

21. Las personas siempre intentan rescatarte, y a veces tienes suerte.

“ESCUCHA AMIGO, puedo cuidarme yo sol— oh estoy tan lastimado que no puedo caminar”.
22. Dices, “¡Estoy bien! y, “Confía en mí, no me pasó nada” todo el tiempo.

23. Eres muy bueno para recuperarte rápidamente.

Es decir, ya casi no te das cuenta.
24. ¡Porque todas esas heridas te han hecho súper fuerte!

25. Y estás orgulloso de tus cicatrices de guerra porque casi todas vienen con una buena historia.
