
¿Como están pasando las vacaciones? Yo bien, a menos que en su país no las haya, pero en el mío sí las hay.
El amor no es la única cosa que puede partir nuestro corazón, también existen esas cosas diarias con las que ya tenemos una relación y que cuando fallan, nos destrozan el alma.

7-. Querer comer en la calle pero saber que hay comida en la casa

Hay veces que simplemente se antoja comer en la calle, ya sea en un Burger King o en un puesto de tacos.
Justo cuando tu pensamiento y deseo es grande, aparece en tu memoria el recuerdo de que en tu casa hay latas de atún y galletas saladas. Y se sigue sintiendo igual que cuando eras un niño y querías comida chatarra pero tus padres te la negaban y te daban algo asqueroso como hígado empanizado.

6-. Ver que están escribiendo en Whatsapp pero que no te digan nada

Estás a punto de hablarle a alguien y te aparece que está escribiendo. Te emocionas y hasta dices tener suerte porque esa persona se acordó de ti primero, luego eso simplemente desaparece. Si no es así, entonces estás en una conversación y el eterno "escribiendo..." aparece, para terminar siendo un "ok" o "jaja".
Nunca escribió lo que creímos y se robó una parte de nuestro corazón.

5-. Recordar lo que tienes pendiente por hacer

Vas tranquilamente disfrutando de la vida,un sueño, un momento feliz o hasta del paisaje; luego en tu mente viene un brutal recuerdo de un pendiente y todo se viene abajo.
Sólo basta recordar todas esas veces a media noche que te estabas acostando o ya estabas dormid@ y a tu mente venía que no hiciste la tarea.

4-.Ver que el Metrobús viene lleno

Cuando más necesitas de un momento a solas por el estrés en la oficina, el Metrobús, el Metro o el camión aparecen atascados y dejando en claro que no dejarán de estar llenos hasta el amanecer del día siguiente.
Tu corazón se rompe cada que el tren o camión pasa frente a ti y logras ver como van todos en el interior cual lata de atún.

3-.Entrar al sanitario y ver que no hay papel

Uno de los placeres de la vida que no ha sido valorado es el ir al baño y dejar salir todos los "problemas".
Y cuando entras a un baño, tomas asiento y volteas para ver si hay papel higiénico para disfrutar el momento pero te das cuenta que no hay, el mundo se viene abajo. La vida pierde total sentido y es mejor no quedarse en este mundo lleno de sufrimiento.

2-. Abrir el refrigerador y ver que ya no está lo que buscas

Ayer por la noche viste el refrigerador y había por ahí restos de pastel, leche, salchichas, tocino o lo que sea que te guste.
Por la mañana decides ir por eso que viste horas antes y ya no está, justo en ese momento el corazón cae en pedazos.
1-.Despertar para ir a trabajar

No hay nada más difícil y triste que tener que levantarse de la cama para ir a trabajar o ir a la escuela. El calor de la cama, el aroma de tu cuerpo pegado a las sábanas, la cómoda forma de tu cabeza en la almohada y ese inexplicable pero hermoso sentimiento al estar en ella, se ve salvajemente destruído por la obligación y los deberes.
Cada mañana una parte de tu corazón queda en la cama, esperando el día de descanso.

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