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Este fue el caso de un ladrón chileno que terminó sufriendo un revés a causa de su propia codicia.
En imágenes subidas al Youtube se puede apreciar cómo el conductor de una línea de servicio de transporte al llegar a un paradero cobra el pasaje a dos mujeres, una de las cuales toma lugar en el primer asiento, junto a la puerta.



Luego el ladrón tratando de hacerse pasar como un usuario del servicio trató de hurtar a la primera pasajera que arribó el vehículo.



Para desgracia del ladrón, el conductor de la máquina reaccionó rápido, atrapando su mano con la puerta del vehículo. Acto seguido y armado de un bate, logró reducir a garrotazos al individuo, mientras seguía desplazando el vehículo para entregarlo a la autoridades policiales.
Lo que llamó la atención, era que mientras el asaltante era golpeado, éste intentó excusarse alegando que todo era parte de una broma y que la víctima era su "tía María del campo"... antes de romper en un llanto simulado.


Finalmente, el delincuente fue identificado como Pablo Ignacio Riquelme Curiqueo (22), quien tenía condenas por robo con sorpresa, robo con intimidación, lesiones y robo con violencia.
Tras formalizar la denuncia, el sujeto por los antecedentes penal quedó en prisión preventiva.