Ellas no se dieron cuenta de la gravedad de la situación.
Esta mujer a quién el entusiasmo no le sirvió de nada:
Esta mujer que decidió que aquí es donde vive ahora:
Esta mujer que llegó a conocer la arena un poco mejor de lo que quería:
Esta mujer que llegó a conocer la arena un poco mejor de lo que quería:
Esta mujer que no previó que un lavabo podría ser un poco resbaladizo:
Esta mujer cuyos pies decidieron que ya era más que suficiente:
Esta mujer que decidió darse un chapuzón sin su bicicleta:
Estas mujeres que quisieron demostrar cómo funciona el gran “Colisionador de Hadrones”:
Esta mujer que se impulsó demasiado
Esta mujer que quiso hacer una versión reducida de ‘wakeboarding’:
Esta mujer dando un ejemplo profesional de un ‘vueltegato’bote hacia adelante:
Esta mujer que tenía una carrera tan prometedora.
Esta mujer que quizás haya encontrado una entrada al infierno:
Esta mujer que trabajó brevemente para el ‘Ministerio del Caminado Ridículo’:
Esta mujer que al menos tenía una piscina donde caerse:
Esta mujer cuyo miedo a las alturas demostró ser de poca ayuda al balancearse en una cuerda:
Esta mujer que cuyo entusiasmo pudo más que ella:
Esta mujer que trató de encontrar una manera todavía más elegante de montar a caballo y derramó su café de ‘Starbucks’ en el proceso:
Esta mujer cuyo intento de hacer una vuelta terminó en caída:
Esta mujer que estaba dominando completamente su ‘Kinect’, hasta que la mesa se metió:
Esta mujer cuyo astuto plan no logró salvarla de caer en el lodo:
Esta mujer que demostró que ningún lugar es seguro:
Esta mujer a quién el entusiasmo no le sirvió de nada:

Esta mujer que decidió que aquí es donde vive ahora:
Esta mujer que llegó a conocer la arena un poco mejor de lo que quería:

Esta mujer que llegó a conocer la arena un poco mejor de lo que quería:

Esta mujer que no previó que un lavabo podría ser un poco resbaladizo:

Esta mujer cuyos pies decidieron que ya era más que suficiente:

Esta mujer que decidió darse un chapuzón sin su bicicleta:

Estas mujeres que quisieron demostrar cómo funciona el gran “Colisionador de Hadrones”:

Esta mujer que se impulsó demasiado

Esta mujer que quiso hacer una versión reducida de ‘wakeboarding’:

Esta mujer dando un ejemplo profesional de un ‘vueltegato’bote hacia adelante:

Esta mujer que tenía una carrera tan prometedora.

Esta mujer que quizás haya encontrado una entrada al infierno:

Esta mujer que trabajó brevemente para el ‘Ministerio del Caminado Ridículo’:

Esta mujer que al menos tenía una piscina donde caerse:

Esta mujer cuyo miedo a las alturas demostró ser de poca ayuda al balancearse en una cuerda:

Esta mujer que cuyo entusiasmo pudo más que ella:

Esta mujer que trató de encontrar una manera todavía más elegante de montar a caballo y derramó su café de ‘Starbucks’ en el proceso:

Esta mujer cuyo intento de hacer una vuelta terminó en caída:

Esta mujer que estaba dominando completamente su ‘Kinect’, hasta que la mesa se metió:

Esta mujer cuyo astuto plan no logró salvarla de caer en el lodo:

Esta mujer que demostró que ningún lugar es seguro:
