1. Cuando el último de tus amigos solteros se casa y llegas a la triste conclusión de que morirás solo:
Está bien, tal vez no es tan dramático, pero ya entendiste el punto…
2. Cuando te das cuenta que tomarte solo dos cervezas te dará una resaca:
Bar abierto = abre la ventana porque estoy a punto de vomitar.
3. Cuando te das cuenta que eres la persona más vieja en la mesa de solteros en una boda:
“¿Alguno de ustedes niños quiere un Lactaid?”.
4. Cuando te encuentras con unos amigos a los que no has visto desde que tenían unos veinte años y se ven VIEJOS y te preguntas si tú te ves igual:
“No hay manera de que yo me vea así, ¿verdad? ¿VERDAD?”
5. Cuando le explicas la situación de tu vida a alguien y te dicen “bueno, al menos todavía no tienes 40”:
Espera, ¿qué sucede a los 40 que yo no sepa? ¿Todavía cambian más cosas? ¡Dímelo!
6. Cuando estás comprando en la tienda de ropa de moda y el vendedor te pregunta si estás comprando cosas para tu hijo:
Está bien, no volveré a comprar nada en Urban Outfitters jamás en mi vida.
7. Cuando todos tus amigos adultos hablan sobre sus hipotecas y te das cuenta que ni siquiera tienes una cuenta de ahorros:
¿Hipotecas? ¿Cómo las de Monopoly?
8. Cuando tus jeans “ajustados” se convierten en tus jeans de “no hay manera de que vuelvan a entrarte de nuevo”:
Fue divertido mientras duraron, jeans.
9. Cuando te das cuenta que el tatuaje que te hiciste en la universidad se está moviendo lentamente hacia el ecuador:
A este ritmo estará en tu pie en cuatro años.
10. Cuando te das cuenta de que tus ahorros son esa caja de peluches en la casa de tus padres:
Deben valer algo, supongo.
11. Cuando encuentras un lunar y no sabes si es viejo o nuevo:
Por supuesto que inmediatamente presientes lo peor.
12. Cuando ves a chicos usando camisetas de “Nirvana” de la misma manera que tú usabas las de “The Doors”:
Para tu información: Los chicos de ahora son tan ajenos a “Nirvana” como tú lo fuiste a “The Doors”.
13. O peor aún, cuando te das cuenta que la nueva estrella sexy del pop es lo suficientemente joven como para ser tu hija:
“Espera, ¿cómo puede ser posible? Espera, no importa ya hice la cuenta”.
14. Cuando uno de tus compañeros de trabajo jóvenes menciona el programa de televisión favorito de su niñez y te das cuenta que estabas en la universidad cuando se estrenó el primer episodio:
“Sí, conozco ese programa “All Those Thornberry Stevens” Sigo en onda “. - Tú sin idea de lo que estás hablando.
15. Cuando inesperadamente te da dolor de espalda, ¡SIN NINGUNA RAZÓN!
¡Todo lo que cargué fue la bolsa del supermercado!
16. Cuando te das cuenta que hiciste planes para el sábado por la noche y lo único que en realidad quieres hacer es quedarte en casa mirando Netflix:
Una vez que me ponga mi pijama no hay manera de que me lleves a algún bar ruidoso. Lo siento pero no tanto…
17. Cuando te das cuenta que eres más viejo de lo que tus padres eran cuando te tuvieron y que ellos ya tenían todos sus problemas resueltos a esa edad:
¿Quizás era sólo algo de los ochentas?
18. Cuando recibes tu invitación para la reunión de exalumnos del colegio de hace 20 años:
Oh Dios por favor que haya bar abierto! ¡Estoy dispuesto a sufrir después las consecuencias de la resaca!

Está bien, tal vez no es tan dramático, pero ya entendiste el punto…
2. Cuando te das cuenta que tomarte solo dos cervezas te dará una resaca:

Bar abierto = abre la ventana porque estoy a punto de vomitar.
3. Cuando te das cuenta que eres la persona más vieja en la mesa de solteros en una boda:

“¿Alguno de ustedes niños quiere un Lactaid?”.
4. Cuando te encuentras con unos amigos a los que no has visto desde que tenían unos veinte años y se ven VIEJOS y te preguntas si tú te ves igual:

“No hay manera de que yo me vea así, ¿verdad? ¿VERDAD?”
5. Cuando le explicas la situación de tu vida a alguien y te dicen “bueno, al menos todavía no tienes 40”:

Espera, ¿qué sucede a los 40 que yo no sepa? ¿Todavía cambian más cosas? ¡Dímelo!
6. Cuando estás comprando en la tienda de ropa de moda y el vendedor te pregunta si estás comprando cosas para tu hijo:

Está bien, no volveré a comprar nada en Urban Outfitters jamás en mi vida.
7. Cuando todos tus amigos adultos hablan sobre sus hipotecas y te das cuenta que ni siquiera tienes una cuenta de ahorros:

¿Hipotecas? ¿Cómo las de Monopoly?
8. Cuando tus jeans “ajustados” se convierten en tus jeans de “no hay manera de que vuelvan a entrarte de nuevo”:

Fue divertido mientras duraron, jeans.
9. Cuando te das cuenta que el tatuaje que te hiciste en la universidad se está moviendo lentamente hacia el ecuador:

A este ritmo estará en tu pie en cuatro años.
10. Cuando te das cuenta de que tus ahorros son esa caja de peluches en la casa de tus padres:

Deben valer algo, supongo.
11. Cuando encuentras un lunar y no sabes si es viejo o nuevo:

Por supuesto que inmediatamente presientes lo peor.
12. Cuando ves a chicos usando camisetas de “Nirvana” de la misma manera que tú usabas las de “The Doors”:

Para tu información: Los chicos de ahora son tan ajenos a “Nirvana” como tú lo fuiste a “The Doors”.
13. O peor aún, cuando te das cuenta que la nueva estrella sexy del pop es lo suficientemente joven como para ser tu hija:

“Espera, ¿cómo puede ser posible? Espera, no importa ya hice la cuenta”.
14. Cuando uno de tus compañeros de trabajo jóvenes menciona el programa de televisión favorito de su niñez y te das cuenta que estabas en la universidad cuando se estrenó el primer episodio:

“Sí, conozco ese programa “All Those Thornberry Stevens” Sigo en onda “. - Tú sin idea de lo que estás hablando.
15. Cuando inesperadamente te da dolor de espalda, ¡SIN NINGUNA RAZÓN!

¡Todo lo que cargué fue la bolsa del supermercado!
16. Cuando te das cuenta que hiciste planes para el sábado por la noche y lo único que en realidad quieres hacer es quedarte en casa mirando Netflix:

Una vez que me ponga mi pijama no hay manera de que me lleves a algún bar ruidoso. Lo siento pero no tanto…
17. Cuando te das cuenta que eres más viejo de lo que tus padres eran cuando te tuvieron y que ellos ya tenían todos sus problemas resueltos a esa edad:

¿Quizás era sólo algo de los ochentas?
18. Cuando recibes tu invitación para la reunión de exalumnos del colegio de hace 20 años:

Oh Dios por favor que haya bar abierto! ¡Estoy dispuesto a sufrir después las consecuencias de la resaca!