
En las afueras de la ciudad de Guatemala, capital del país del mismo nombre, existe un vertedero gigantesco de basura a las riveras de un río, al que algunos lo llaman “la mina”. Los habitantes que viven en las aldeas vecinas bucean en inmensos cerros de basura y chatarra, con la finalidad encontrar algo que podrían vender y obtener sustento económico para sus familias.
De más está decir que el río está totalmente contaminado por la gran cantidad de desperdicios que alberga.
























