
El comienzo fue bastante humilde:
una casa rodante común y corriente.


No decía mucho...


Aunque por adentro era bastante desagradable.


Y sucio.



Aparentemente, los dueños anteriores no se preocuparon demasiado por mantenerla en buen estado.



Así que la solución fue vaciarla.




Y empezar de cero.


Reacondicionando tanto el interior...


Como el exterior.





Después la pintaron.



Y luego comenzaron a amueblarla.


Acomodando todo donde debía ir.



De a poco fue tomando forma...




Las luces fueron un elemento importante para darle la impronta retro.



Y este fue el resultado final:






Esta buenísima, ¿no?





