Introducción:
En este ensayo hablaremos sobre las abuelas de plaza de mayo y su importancia e influencia en el pueblo argentino y el mundo.
La asociación que fue en contra de la corriente
Esta asociación nació a raíz de los secuestros llevados a cabo por el golpe de estado o “Proceso de Reorganización nacional” que se dio en la Argentina entre los años 1976 y 1983. Tiene como finalidad recuperar, mediante las abuelas, la identidad de los nietos, hijos de las mujeres que dieron a luz mientras estaban secuestradas y procurar que nunca más vuelva a suceder algo tan atroz como el golpe de estado.
Está presidida por Estela Barnes de Carlotto y tiene su sede central en Buenos Aires. Hasta agosto de 2014 las Abuelas han recuperado la identidad original de 114 nietos.
Comenzó el 30 de abril de 1977 cuando un grupo de padres, madres y familiares de desaparecidos, en busca de alguna respuesta, comenzó a marchar cada jueves alrededor de la plaza de mayo. En ese momento, nadie se atrevía a hacerle frente al golpe militar.
Primero se reconocían entre sí con llevando un clavo. Luego comenzaron a llevar un pañuelo de tela blanco sobre la cabeza. Así adoptó el nombre de Madres de Plaza de Mayo y comenzó a ejercer presión sobre el gobierno militar. Ese 15 de mayo 13 abuelas firman un Hábeas Corpus, carta dirigida a la municipalidad de Morón comunicando que había nietos desaparecidos y por lo tanto se suspendieran las adopciones. Esta carta es, actualmente, un documento histórico de Argentina.
Comenzaron llamándose “Abuelas Argentinas con Nietos Desaparecidos” siendo Alicia De La Cuadra la primera presidente y en 1980 recibieron el nombre con el que se las conoce hoy.
Establecieron la consigna de “Recuperar a los nietos sin olvidar a los hijos”
“Los militares decían: “Déjenlas a esas viejas locas que ya se van a calmar”, pero de haber sabido que perduraríamos para siempre nos habrían secuestrado a todas”
Estela de Carlotto
Las abuelas han establecido como fecha simbólica de creación el sábado 21 de Noviembre de 1977 ya que no hay un día exacto en el que se crearon
Al principio hubo discusiones acerca de si era seguro presentarse normalmente o no. Pero para realizar los trámites debidos debían tener un nombre y por eso acordaron que sí.
“Nuestra primera reunión fue en un entrepiso en Retiro. Todas sabíamos que nuestro objetivo era buscar a nuestros nietos” Delia Giovanola de Califano
Comenzaron a reunirse en confiterías e iglesias aparentando que tomaban el té o celebraban algún cumpleaños.
“Nosotras éramos simples amas de casa y ninguna tenía alguna experiencia política u organizativa” Haydee de Lemos
Armaron carpetas con los daos de las personas desaparecidas para ser enviadas a organizaciones nacionales e internacionales que les pudieran brindar alguna ayuda humanitaria.
Lo más impresionante fue la organización para la búsqueda de información en los orfanatos y casas cunas del país. Crearon así una amplia red de datos que llegó hasta lo más ínfimo del país.
Entre el 8 y el 10 de diciembre de 1977 fueron secuestradas y desaparecidas doce personas vinculadas a la Madres de Plaza de Mayo.
Las Abuelas pidieron ayuda nacional pero no se les fue otorgada. Entonces pidieron ayuda a internacional, a iglesia y al mismo papa, a la cruz roja y a UNICEFF pero no fueron escuchadas.
En noviembre de 1977 finalmente, la Organización Internacional de Derechos Humanos escuchó los pedidos de ayuda y publicó una carta de las Abuelas comunicando que había niños desaparecidos en Argentina.
Pocos años después, las Abuelas criticaron la postura de la iglesia ante su pedido de ayuda en una carta.
El 5 de agosto de 1978, víspera del día del niño, el diario La Prensa aceptó la publicación de una carta de las Abuelas, comenzando a movilizar no solo al territorio nacional sino también internacional.
Hasta 1985 realizaron un total de 40 viajes a Roma casi sin dinero suficiente, p ara hablar con distintos funcionarios y extender su protesta hasta allí.
En un viaje a Brasil, las Abuelas encontraron, junto con una fundación brasileña que luchaba por la misma causa que ellas, a dos niños que habían sido secuestrados.
Junto con la Amnistía Internacional logran juntar 14000 firmas de un petitorio internacional por los niños desaparecidos. Poco a poco las Abuelas iban ganando reconocimiento internacional.
El 6 de Septiembre de 1979, la Organización Internacional de Derechos Humanos se instaló en Argentina para ver cómo estaban los derechos humanos en el país.
Posteriormente, por primera vez una organización internacional, la CIDH, publicó un informe criticando al golpe de estado nacional.
De ahí en adelante, las abuelas consiguieron un mayor reconocimiento internacional.
En 1980, las abuelas consiguieron información de los desaparpecidos en la Argentina, los represores, los centros clandestinos de detención, nacimientos clandestinos, etc., que ocultaban en los envoltorios de bombones o en la ropa para que le llegara a la gente. Esto sería de vital importancia.
El 19 de marzo de 1980, las Abuelas localizaron dos nietas más.
El mismo año encontraron a otra nieta más luego de peligrosas investigaciones.
El 9 10 de diciembre, las abuelas y madres de plaza de mayo realizan la primera marcha de Resistencia durante 24 horas, sin luz y bajo la lluvia. Participaron 70 personas y durante la mañana del día 10 se sumaron otras 3000, junto con organizaciones de derechos humanos y el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel. Marcharon por Avenida de Mayo y la 9 de julio coreando consignas, una de ellas “Los desaparecidos, que digan dónde están”
Luego de la caída del golpe militar, e n 1983, lograron las Abuelas encontrar a 5 nietos más.
El regreso de la democracia parecía facilitar el trabajo de las Abuelas, pero no sirvió tanto como esperaban.
Las Abuelas buscaron entonces el reconocimiento genético de sus nietos mediante el avance de la genética
Una de estas nietas, Carla, fue secuestrada por Juan Rulfo. Cuando encontraron a Carla, encerraron a Rulfo. Pero debido a la ley de Obediencia Debida dictada por Raúl Alfonsín, que establecía que no los funcionarios militares no eran punibles, Rulfo quedó en libertad.
En 1984 las Abuelas encontraron a la primera nieta mediante análisis genéticos.
En 1987 encontraron a la primera nieta nacida en cautiverio.
La sanción de las leyes de Punto Final y de obediencia Debida generó que varios violadores de los derechos humanos quedaran libres. Por supuesto que, las Abuelas, junto con las organizaciones de derechos humanos estaban en total desacuerdo con la sanción de estas leyes.
En 1987 las Abuelas iniciaron la causa penal más importante de derechos humanos en Argentina, expresando que el secuestro de los 194 niños era culpa de órdenes impulsado desde el más alto nivel del Estado durante la dictadura.
En 1998 un subcomisario fue condenado a dos años de prisión por la apropiación ilegal de dos mellizos.
Este mismo año, se incorporaron, gracias a la propuesta de Abuelas, en los artículos 7 y 8 de la constitución, los derechos de niño.
Al cumplir 20 años, los nietos eran ya adolescentes y las abuelas abrieron más su alcance a la gente permitiendo que si alguien tuviera dudas de su identidad, pudiera hacerse las pruebas de ADN.
En el 2000 se estrenó la película “Botín de Guerra” que contaba la histo(ria de las Abuelas.
El 24 de marzo de 2004 se recuperó la ESMA para realizar allí un espacio de memoria. En el acto oficial hablaron tres nietos recuperados que habían nacido allí.
En el 2006, la novela de gran fama Montecristo, incluyó a los nietos nacidos en cautiverio durante la dictadura en su argumento.
En el 2007, al cumplir 3 décadas, se lanzaron al aire 3 historias (2 verdaderas y 1 no) sobre nietos recuperados con el nombre de Televisión Por la Identidad.
La última nieta fue encontrada el 22 de agosto de 2014.
Actualmente llevan recuperados 115 nietos y continúan trabajando en la Escuela de la Armada.
Conclusión
En Argentina, reinaban tiempos de horror, muerte y caos. Los monstruos que habían usurpado el poder, suprimían cualquier acto en contra de su gobierno de manera violenta y por eso nadie se atrevía a hacerles frente. Es entonces cuando las Abuelas, valientes en busca de lo que les fue quitado, aparecen para recordarle al pueblo argentino que hay algo mucho mejor que lo que están viviendo, que los derechos son algo que nos pertenece a todos y que debemos luchar por recuperarlos.
“No dejes que la tormenta oscurezca tu sonrisa. La clave para alcanzar la meta, es siempre ser optimista”
En este ensayo hablaremos sobre las abuelas de plaza de mayo y su importancia e influencia en el pueblo argentino y el mundo.
La asociación que fue en contra de la corriente
Esta asociación nació a raíz de los secuestros llevados a cabo por el golpe de estado o “Proceso de Reorganización nacional” que se dio en la Argentina entre los años 1976 y 1983. Tiene como finalidad recuperar, mediante las abuelas, la identidad de los nietos, hijos de las mujeres que dieron a luz mientras estaban secuestradas y procurar que nunca más vuelva a suceder algo tan atroz como el golpe de estado.
Está presidida por Estela Barnes de Carlotto y tiene su sede central en Buenos Aires. Hasta agosto de 2014 las Abuelas han recuperado la identidad original de 114 nietos.
Comenzó el 30 de abril de 1977 cuando un grupo de padres, madres y familiares de desaparecidos, en busca de alguna respuesta, comenzó a marchar cada jueves alrededor de la plaza de mayo. En ese momento, nadie se atrevía a hacerle frente al golpe militar.
Primero se reconocían entre sí con llevando un clavo. Luego comenzaron a llevar un pañuelo de tela blanco sobre la cabeza. Así adoptó el nombre de Madres de Plaza de Mayo y comenzó a ejercer presión sobre el gobierno militar. Ese 15 de mayo 13 abuelas firman un Hábeas Corpus, carta dirigida a la municipalidad de Morón comunicando que había nietos desaparecidos y por lo tanto se suspendieran las adopciones. Esta carta es, actualmente, un documento histórico de Argentina.
Comenzaron llamándose “Abuelas Argentinas con Nietos Desaparecidos” siendo Alicia De La Cuadra la primera presidente y en 1980 recibieron el nombre con el que se las conoce hoy.
Establecieron la consigna de “Recuperar a los nietos sin olvidar a los hijos”
“Los militares decían: “Déjenlas a esas viejas locas que ya se van a calmar”, pero de haber sabido que perduraríamos para siempre nos habrían secuestrado a todas”
Estela de Carlotto
Las abuelas han establecido como fecha simbólica de creación el sábado 21 de Noviembre de 1977 ya que no hay un día exacto en el que se crearon
Al principio hubo discusiones acerca de si era seguro presentarse normalmente o no. Pero para realizar los trámites debidos debían tener un nombre y por eso acordaron que sí.
“Nuestra primera reunión fue en un entrepiso en Retiro. Todas sabíamos que nuestro objetivo era buscar a nuestros nietos” Delia Giovanola de Califano
Comenzaron a reunirse en confiterías e iglesias aparentando que tomaban el té o celebraban algún cumpleaños.
“Nosotras éramos simples amas de casa y ninguna tenía alguna experiencia política u organizativa” Haydee de Lemos
Armaron carpetas con los daos de las personas desaparecidas para ser enviadas a organizaciones nacionales e internacionales que les pudieran brindar alguna ayuda humanitaria.
Lo más impresionante fue la organización para la búsqueda de información en los orfanatos y casas cunas del país. Crearon así una amplia red de datos que llegó hasta lo más ínfimo del país.
Entre el 8 y el 10 de diciembre de 1977 fueron secuestradas y desaparecidas doce personas vinculadas a la Madres de Plaza de Mayo.
Las Abuelas pidieron ayuda nacional pero no se les fue otorgada. Entonces pidieron ayuda a internacional, a iglesia y al mismo papa, a la cruz roja y a UNICEFF pero no fueron escuchadas.
En noviembre de 1977 finalmente, la Organización Internacional de Derechos Humanos escuchó los pedidos de ayuda y publicó una carta de las Abuelas comunicando que había niños desaparecidos en Argentina.
Pocos años después, las Abuelas criticaron la postura de la iglesia ante su pedido de ayuda en una carta.
El 5 de agosto de 1978, víspera del día del niño, el diario La Prensa aceptó la publicación de una carta de las Abuelas, comenzando a movilizar no solo al territorio nacional sino también internacional.
Hasta 1985 realizaron un total de 40 viajes a Roma casi sin dinero suficiente, p ara hablar con distintos funcionarios y extender su protesta hasta allí.
En un viaje a Brasil, las Abuelas encontraron, junto con una fundación brasileña que luchaba por la misma causa que ellas, a dos niños que habían sido secuestrados.
Junto con la Amnistía Internacional logran juntar 14000 firmas de un petitorio internacional por los niños desaparecidos. Poco a poco las Abuelas iban ganando reconocimiento internacional.
El 6 de Septiembre de 1979, la Organización Internacional de Derechos Humanos se instaló en Argentina para ver cómo estaban los derechos humanos en el país.
Posteriormente, por primera vez una organización internacional, la CIDH, publicó un informe criticando al golpe de estado nacional.
De ahí en adelante, las abuelas consiguieron un mayor reconocimiento internacional.
En 1980, las abuelas consiguieron información de los desaparpecidos en la Argentina, los represores, los centros clandestinos de detención, nacimientos clandestinos, etc., que ocultaban en los envoltorios de bombones o en la ropa para que le llegara a la gente. Esto sería de vital importancia.
El 19 de marzo de 1980, las Abuelas localizaron dos nietas más.
El mismo año encontraron a otra nieta más luego de peligrosas investigaciones.
El 9 10 de diciembre, las abuelas y madres de plaza de mayo realizan la primera marcha de Resistencia durante 24 horas, sin luz y bajo la lluvia. Participaron 70 personas y durante la mañana del día 10 se sumaron otras 3000, junto con organizaciones de derechos humanos y el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel. Marcharon por Avenida de Mayo y la 9 de julio coreando consignas, una de ellas “Los desaparecidos, que digan dónde están”
Luego de la caída del golpe militar, e n 1983, lograron las Abuelas encontrar a 5 nietos más.
El regreso de la democracia parecía facilitar el trabajo de las Abuelas, pero no sirvió tanto como esperaban.
Las Abuelas buscaron entonces el reconocimiento genético de sus nietos mediante el avance de la genética
Una de estas nietas, Carla, fue secuestrada por Juan Rulfo. Cuando encontraron a Carla, encerraron a Rulfo. Pero debido a la ley de Obediencia Debida dictada por Raúl Alfonsín, que establecía que no los funcionarios militares no eran punibles, Rulfo quedó en libertad.
En 1984 las Abuelas encontraron a la primera nieta mediante análisis genéticos.
En 1987 encontraron a la primera nieta nacida en cautiverio.
La sanción de las leyes de Punto Final y de obediencia Debida generó que varios violadores de los derechos humanos quedaran libres. Por supuesto que, las Abuelas, junto con las organizaciones de derechos humanos estaban en total desacuerdo con la sanción de estas leyes.
En 1987 las Abuelas iniciaron la causa penal más importante de derechos humanos en Argentina, expresando que el secuestro de los 194 niños era culpa de órdenes impulsado desde el más alto nivel del Estado durante la dictadura.
En 1998 un subcomisario fue condenado a dos años de prisión por la apropiación ilegal de dos mellizos.
Este mismo año, se incorporaron, gracias a la propuesta de Abuelas, en los artículos 7 y 8 de la constitución, los derechos de niño.
Al cumplir 20 años, los nietos eran ya adolescentes y las abuelas abrieron más su alcance a la gente permitiendo que si alguien tuviera dudas de su identidad, pudiera hacerse las pruebas de ADN.
En el 2000 se estrenó la película “Botín de Guerra” que contaba la histo(ria de las Abuelas.
El 24 de marzo de 2004 se recuperó la ESMA para realizar allí un espacio de memoria. En el acto oficial hablaron tres nietos recuperados que habían nacido allí.
En el 2006, la novela de gran fama Montecristo, incluyó a los nietos nacidos en cautiverio durante la dictadura en su argumento.
En el 2007, al cumplir 3 décadas, se lanzaron al aire 3 historias (2 verdaderas y 1 no) sobre nietos recuperados con el nombre de Televisión Por la Identidad.
La última nieta fue encontrada el 22 de agosto de 2014.
Actualmente llevan recuperados 115 nietos y continúan trabajando en la Escuela de la Armada.
Conclusión
En Argentina, reinaban tiempos de horror, muerte y caos. Los monstruos que habían usurpado el poder, suprimían cualquier acto en contra de su gobierno de manera violenta y por eso nadie se atrevía a hacerles frente. Es entonces cuando las Abuelas, valientes en busca de lo que les fue quitado, aparecen para recordarle al pueblo argentino que hay algo mucho mejor que lo que están viviendo, que los derechos son algo que nos pertenece a todos y que debemos luchar por recuperarlos.
“No dejes que la tormenta oscurezca tu sonrisa. La clave para alcanzar la meta, es siempre ser optimista”