La localidad de Bowen, en el sur mendocino, está conmocionada por el caso de una joven madre que salió a bailar con una amiga y dejó a sus cuatro pequeños hijos solos. Cuando volvió, la beba de cuatro meses estaba muerta en su cuna. Los investigadores sospechan que se ahogó con el vómito y murió por broncoaspiración.
De acuerdo con la información policial, en la madrugada del sábado pasado, la madre, de 21 años, le dio la teta a la beba y la dejó sola durmiendo con la única compañía de sus hermanitos de 6 y 4 años, y el tercero, de un año y medio. Alrededor de las tres de la mañana, el tío de los chicos, que vive en una precaria casa de al lado, encontró a la beba muerta en la cuna, la tomó en brazos y la llevó al centro de salud. Pero cuando los médicos la examinaron, ya había fallecido.
El cuarto juzgado de instrucción de General Alvear ordenó realizar la autopsia al cuerpo de la bebé. El resultado de las pericias permitirá determinar si hubo abandono de persona. Los hermanitos han sido dados en custodia a familiares de la madre.
De acuerdo con la información policial, en la madrugada del sábado pasado, la madre, de 21 años, le dio la teta a la beba y la dejó sola durmiendo con la única compañía de sus hermanitos de 6 y 4 años, y el tercero, de un año y medio. Alrededor de las tres de la mañana, el tío de los chicos, que vive en una precaria casa de al lado, encontró a la beba muerta en la cuna, la tomó en brazos y la llevó al centro de salud. Pero cuando los médicos la examinaron, ya había fallecido.
El cuarto juzgado de instrucción de General Alvear ordenó realizar la autopsia al cuerpo de la bebé. El resultado de las pericias permitirá determinar si hubo abandono de persona. Los hermanitos han sido dados en custodia a familiares de la madre.