
Un policía en Estambul, Turquía, se tomó una selfie con un hombre llamado Sadrettin Saskin que se disponía a lanzarse desde un puente sobre el estrecho de Bósforo.
La imagen fue captada por un transeúnte que estaba en el lugar de los hechos y ha generado polémica en el país.
Después de tres horas, el suicida llevó a cabo su cometido y se lanzó del puente. Su cuerpo fue encontrado horas más tarde por las autoridades.
Esta era la tercera ocasión en la que Sadrettin Saskin intentaba suicidarse afectado por diversos problemas personales y económicos
