¿Estás ahí Dios? Soy Yo, Perro...
El hecho de que los perros sean animales, no significa que no tengan preguntas o que no sientan curiosidad por ciertos temas. Por eso hoy te damos un ejemplo de cómo serían las preguntas que nuestros amigos caninos le hacen a Dios…
Querido Dios:
¿Por qué los humanos huelen las flores pero nunca se huelen entre ellos?

Querido Dios:

Querido Dios: Cuando vayamos al cielo… ¿Podemos acostarnos en el sillón? ¿O también allí está prohibido?

Querido Dios: ¿Por qué existe un auto con el nombre “jaguar” y no existe ninguno con el nombre “perro”?

Querido Dios: Si un perro ladra hasta el cansancio en el medio del bosque y ningún humano puede escucharlo… ¿Sigue siendo un mal perro?

Querido Dios: Nosotros entendemos las órdenes de los humanos, sus señas, silbidos, bocinazos, etc., etc., etc., ¿Qué entienden los humanos?

Querido Dios: Más carne, menos spaghetti por favor.

Querido Dios: ¿Existen carteros en el cielo? Sí es que existen… ¿Me tengo que disculpar?

Querido Dios: Esta es mi lista de cosas que tengo que recordar para ser un buen perro:
1- No comer la comida del gato antes que él, o luego de que la vomite.
2- El cesto de basura no es un frasco con galletitas.
3- El Sillón no es una “toalla facial”.
4- Poner la nariz en la entrepierna de alguien es una forma de saludar inaceptable.
5- El recolector de basura está trabajando, no robando.
6- Debo sacudirme y secarme antes de entrar a la casa, no después.
7- No frotar mi trasero por la alfombra cuando vuelvo del jardín

PD: Querido Dios: ¿En el cielo seguiré estando castrado?