
Seguramente, y al igual que yo, se conmovieron con el post del user @AIexandro sobre la fiesta de despedida de Duke.
Hoy les traigo una historia similar, esta vez de Elmo
Esta es la historia de Elmo, un perrito cuyos días estaban contados, pero su dueño, James García, se aseguró de que fueran los mejores de su vida
James se enteró del diagnóstico de Elmo hace un par de semanas

Le diagnosticaron cáncer de hígado, insuficiencia renal y problemas vesiculares.

En lugar de entristecerse, James se aseguró de que cada día de Elmo valga realmente la pena

"El veterinario le dio un par de meses", cuenta James. "Así que decidí que en lugar de tirarme a llorar, haría que cada instante importe y decidí llevarlo a mis lugares favoritos en Nueva York"

Elmo en el Times Square.

Ya que sus patitas no respondían, Elmo se paseaba por todos lados con un cochecito hecho especialmente para él

Un artista de la zona, Greg Siff, pintó un retrato de Elmo

Elmo en graffitti

Mirando el atardecer en Manhattan.

Cultivándose un poco en el MOMA.

Mirando vidrieras en Nueva York

Elmo conoce a Elmo

Haciendo caras con gente que pasaba

"Nunca quise que se sintiera solo en el departamento. Le encantaba salir a pasear", dice James. "Venía conmigo a restaurants, supermercados y hasta a dormir siestas en el parque"

El camino que siempre le gustó tomar a Elmo

James promete que en algún momento plasmará todas sus experiencias con Elmo en un libro para enseñarle a la gente la manera en la que se despide una mascota

James y Elmo

Hasta Siempre!

