
Un protocolo de prevención de conflictos entre Argentina y Uruguay
Eso es lo que pretenden establecer los candidatos Tabaré Vázquez y Daniel Scioli (gobernador de Buenos Aires y precandidato presidencial argentino).

Así habló el candidato del FA Tabaré Vázquez:
“Hemos analizado la posibilidad de llevar adelante discusiones, profundizar en temas que no son comunes a lo largo del tiempo y establecer una agenda de esos temas y un protocolo que lleve a que en sucesivas reuniones encontremos los caminos para que en caso de que existan problemas superarlos. Y también, en términos médicos, una acción preventiva para controversias que naturalmente existen en cualquier relacionamiento humano y entre los países”.
Así habló por su parte Daniel Scioli:
“Compartiendo la visión de futuro de fortalecer una integración productiva, de infraestructura, de conectividad en el sentido más profundo de la palabra. Que pueda a estos procesos históricos que se vienen dando en estos países, haber salido de crisis profundas de lo social, lo económico, lo productivo y lo institucional. Que podamos proyectar buscando la complementación a partir de una hermandad, de un cariño entrañable de los pueblos”.

La empresa de transporte fluvial Línea Delta y la compañía de ómnibus Vía Bariloche cerraron una alianza de servicios con la firma de turismo y transporte Moldax S.A., que tiene su base de operaciones en la terminal Tres Cruces.

Con actividades desde hace cinco años a nivel local e internacional, con su flota de 6 unidades propias, la empresa uruguaya Moldax realiza la conexión terrestre para la empresa Lineas Delta Argentino entre Montevideo y Nueva Palmira. Por su parte, Vía Bariloche, cuyos ómnibus parten desde Buenos Aires rumbo a destinos como Bariloche y Cataratas.
El servicio internacional de Líneas Delta se cumple, desde hace 22 años, entre el puerto uruguayo de Nueva Palmira y la estación fluvial de Tigre, en la provincia de Buenos Aires. Se incluye transporte terrestre entre Nueva Palmira y la ciudad de Colonia, en Uruguay; así como entre el Tigre y la terminal Liniers, en Buenos Aires, del lado argentino.
leer más: http://www.elpais.com.uy/economia/gente-negocios/nueva-conexion-buenos-aires-monevideo.html

Eduardo Costantini, presidente de la constructora Consultatio y el responsable de haber construido el barrio de Nordelta en la Argentina, ahora tendrá a su cargo el puente que unirá los partidos de Maldonado y Rocha en Uruguay.

A la obra. La empresa del argentino financiará el 75 por ciento de la construcción.
Con una inversión de US$ 10 millones –financiada en un 75 por ciento por Consultatio- se inauguró la construcción del puente (que se llamará Laguna Garzón) en un acto oficial donde además del empresario estuvo presente el presidente de Uruguay, José Mujica.

La obra en sí estará a cargo de la empresa Saceem, que tuvo que pelear con otras cuatro firmas más que se presentaron en la licitación. Según se explicó, el puente estará listo dentro de un año, para el verano 2015/2016.
Diseñado por el arquitecto uruguayo, Rafael Viñoly, el proyecto de Puente Laguna Garzón tendrá forma circular, con una estructura de hormigón que se sostendrá a base de pilotes.
El mismo tendrá un sector para el tránsito vehicular (se estima pasarán alrededor de 1000 vehículos por día) y un paso peatonal.

El que viene también será un super domingo electoral para la Argentina por una simple razón: los comicios de Brasil y Uruguay definirán quiénes serán los presidentes vecinos durante los próximos cuatro años y en función de esos perfiles impactarán las relaciones diplomáticas de ambos países.
Más allá de que las encuestas muestran favoritismos por unos u otros candidatos, tal como están dados los escenarios electorales en cada país ya se puede trazar un esquema tentativo de cómo serán los vínculos bilatertales de Brasil y Uruguay con la Argentina luego del resultado de los comicios.
En líneas generales todo indica que no habrá cara de buenos amigos entre los nuevos vecinos que podrían aflorar.
Podrá haber sorpresas, cambio de planes o algunas novedades de último momento de parte de los ganadores del domingo. Pero los nuevos presidentes que asuman en Brasil y Uruguay ya tienen una idea acabada del vínculo que quieren establecer con la Argentina en el futuro.

Por el perfil que caracteriza a Dilma Roussef y Aécio Neves en Brasil o Tabaré Vázquez y Luis Lacalle Pou en Uruguay, que son los candidatos que encabezan los sondeos de opinión, se puede armar un hipotético mapa de los vecinos con los que deberá convivir Cristina Kirchner en lo que le resta de mandato y su sucesor en los próximos años:
Para Brasilia, las trabas que impone Buenos Aires complican la balanza comercial, en los últimos años en favor de la Argentina.
Dilma Rousseff. La presidenta de Brasil que aspira a su reelección tiene una buena relación con Cristina Kirchner .
Pero ya dejó en claro que si gana quiere replantear su relación con la Argentina y profundizar el papel de Brasil como líder del Mercosur. Ayer, su asesor en temas internacionales como es Marco Aurelio García dijo al diario Folha de Sao Paulo que "es errado pensar de que Dilma se alejará del Mercosur".
Pero aclaró que la presidenta de Brasil acelerará los tiempos para avanzar en un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea que hoy está trabado por la Argentina, según apuntan en Brasilia. No habrá en este escenario una ruptura del Mercosur para apuntalar un acuerdo unilateral con UE.
Aécio Neves. El candidato opositor al PT expresó ayer su deseo de "flexibilizar" las normas del Mercosur para poder negociar acuerdos bilaterales sin el consenso del bloque suramericano.
"No nos podemos permitir, como ocurrió a lo largo de estos últimos dos años, por ejemplo, que la posición de Venezuela y de Argentina impida a Brasil avanzar en acuerdos con otras regiones del mundo que serían benéficos para nosotros", dijo Neves en Mato Grosso do Sul.
Fuentes calificadas de la Unión Europea expresaron a LA NACION que "es muy probable que Brasil, Paraguay y Uruguay se sumen un acuerdo multipartito con la UE sin romper con el Mercosur para que luego adhieran Venezuela y la Argentina si quieren".
Este camino es el que avala Neves. Está claro que si el candidato del PSDB gana el domingo no será un presidente muy amigo de Cristina Kirchner porque tiene muchas diferencias con el kirchnerismo.
Por empezar su buena relación con los industriales paolistas que estan hartos de la política comercial de la Casa Rosada. También Neves se destaca por su cercanía con Estados Unidos y por tener ciertos reparos en la Unasur.
De todas formas, como dijo José Botafogo Gonçalves, quien fuera embajador de Brasil en Buenos Aires en 2003, "gane Aécio o gane Dilma ambos van a buscar una cresciente integracion entre el Mercosur y la Alianza del Pacífico porque otra vez la historia y la geografia no pueden ser ignoradas".
No obstante, Botafogo fue muy pragmático en su proyección: aclaró que Brasil sufre las consecuencias de la crisis económica de Argentina y por lo tanto "la única salida es esperar que Argentina cambie su política macro-económica". O sea, que haya otro gobierno.

Las relaciones entre Cristina Kirchner y Tabaré Vázquez no podrían ser peores: si bien comparten alguna visión común desde la centroziquierda sus miradas del mundo difieren considerablemente.
Tabaré Vázquez. El candidato presidencial del Frente Amplio gobernante tiene una relación traumática con el kirchnerismo. Cuando fue presidente se enfrentó duramente con Néstor Kirchner por las papeleras de Fray Bentos. No sólo esto. Luego de dejar su gobierno, en 2011, Vázquez admitió públicamente que en un momento requirió ayuda de Estados Unidos para declararle una eventual guerra a la Argentina por el caso Botnia.
No es casual que en tren de mirar el futuro de la Argentina poskirchnerista Tabaré Vázquez se haya reunido anteayer con Daniel Scioli, el candidato presidencial en quien más se siente cómodo.
Dos personas que estuvieron en Colonia en ese encuentro aseguraron que hubo entre ambos dirigentes un "claro entendimiento" y una idea común por resolver hacia adelante los graves problemas que hoy tienen frenadas las relaciones de ambos países y que no son pocos: las trabas comerciales, la hidrovía, las papeleras y los contratos por el dragado de los ríos limítrofes.
Lacalle Pou.
El candidato del Partido Nacional de Uruguay ya se mostró abiertamente antikirchnerista. "Nos vamos a tener que fumar un año de Cristina pero como es una mujer tan desequilibrada, capaz que se peleaba con Mujica y no con nosotros", dijo Lacalle Pou hace unos meses al hacer una proyección de su eventual gobierno.
Las distancias de Lacalle Pou con la Casa Rosada son tan abismales que en el caso de ganar el domingo en el Partido Nacional esperan relaciones mucho más complicadas que las que hoy protagonizan Buenos Aires y Montevideo.
Salvo contadas excepciones de proyecciones favorables, cualquiera sea el resultado del superdomingo electoral, a la Argentina no le deparan caras de buenos amigos entre los vecinos presidentes de Uruguay y Brasil para los próximos años.