En Austria, un padre de 26 años obligó a su pequeña hijia a darse un baño con agua que estaba a 70 grados de temperatura. Eso le produjo múltiples heridas y tras dos semanas de estar hospitalizada murió por "una insuficiencia generalizada".
Estiman que el agua rondaba cerca de los 70 grados. Una locura (Imagen ilustrativa).
Un hecho bestial por donde se lo mire.
Ocurrió en Viena, Austria. Una nena de pocos años de edad, estaba gravemente herida en la espalda por el castigo del padre, de 26 años, que dijo que obligó a la pequeña a tomar la ducha “para educarla”. El agua estaba muy caliente, eso le produjo múltiples heridas y murió por una “insuficiencia generalizada” de sus órganos vitales tras dos semanas hospitalizada.
El hombre, en libertad, podría ser acusado de maltrato infantil con resultado de muerte, según la fiscalía de Viena.
Según las informaciones de la prensa, no confirmadas, la temperatura del agua de la ducha, que tomó la menor, era de entre 50 y 70 grados.
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