”El capitalismo es el peor pecado de la humanidad”, dijo el presidente de Bolivia
El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró hoy en Roma que "el peor pecado de la humanidad es el capitalismo", un modelo que, dijo, favorece "crisis alimentarias y financieras" y que no erradica el hambre por su "ansia de ganancia".
Morales acudió hoy a la sede de la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) en Roma, donde presidió la conferencia "Diálogo sobre Nutrición", organizada por el G-77.
En su intervención Morales afirmó que "el hambre es una violación a la vida humana" y que "los alimentos no son mercancías sino el resultado de la madre tierra".
"A veces hablamos solo de los derechos humanos como contrarios a la violencia, pero el verdadero derecho humano es una buena alimentación", subrayó Morales, para lo que, explicó, son necesarias tierra, agua y energía.
Reclamó el derecho de todas las personas a "tener alimentos sanos y nutritivos, un derecho fundamental a no pasar hambre, para conservar la capacidad física y mental".
Consideró que "un mundo digno es un mundo sin hambre" y pidió "todos los esfuerzos" a nivel internacional para satisfacer las necesidades alimentarias y "erradicar el hambre, la desnutrición y la malnutrición".
Para ello, estimó necesario atender "a los más vulnerables", entre los que señaló a los niños y niñas y a las mujeres lactantes.
Morales recordó que hay 800 millones de personas en el mundo infraalimentadas y malnutridas y que "24.000 personas mueren al día por hambre", un 16 % del total de las muertes que se producen a diario y que son, en su mayoría, "de niños de menos de cinco meses". (EFE)
El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró hoy en Roma que "el peor pecado de la humanidad es el capitalismo", un modelo que, dijo, favorece "crisis alimentarias y financieras" y que no erradica el hambre por su "ansia de ganancia".
Morales acudió hoy a la sede de la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) en Roma, donde presidió la conferencia "Diálogo sobre Nutrición", organizada por el G-77.
En su intervención Morales afirmó que "el hambre es una violación a la vida humana" y que "los alimentos no son mercancías sino el resultado de la madre tierra".
"A veces hablamos solo de los derechos humanos como contrarios a la violencia, pero el verdadero derecho humano es una buena alimentación", subrayó Morales, para lo que, explicó, son necesarias tierra, agua y energía.
Reclamó el derecho de todas las personas a "tener alimentos sanos y nutritivos, un derecho fundamental a no pasar hambre, para conservar la capacidad física y mental".
Consideró que "un mundo digno es un mundo sin hambre" y pidió "todos los esfuerzos" a nivel internacional para satisfacer las necesidades alimentarias y "erradicar el hambre, la desnutrición y la malnutrición".
Para ello, estimó necesario atender "a los más vulnerables", entre los que señaló a los niños y niñas y a las mujeres lactantes.
Morales recordó que hay 800 millones de personas en el mundo infraalimentadas y malnutridas y que "24.000 personas mueren al día por hambre", un 16 % del total de las muertes que se producen a diario y que son, en su mayoría, "de niños de menos de cinco meses". (EFE)