El fantasma de una mujer mayor en ropa victoriana le arruinó la selfie a dos pibas inglesas
Halloween, a veces, se hace carne. Dos chicas inglesas entraron en pánico al descubrir que EL FANTASTMA DE UNA SEÑORA MAYOR, vestida en ropa victoriana, les arruinó una “selfie”.
Victoria Greeves, de 22 años, y Kayley Atkinson, de 23, tomaron la foto en una salida de chicas por la noche en Newcastle-upon-Tyne.
Las dos, ultrafans de las selfies, habían estado tomando unos buenos tragos cuando decidieron hacer la selfie. Pero después de ponerse en su mejor pose de trolas se dieron cuenta que había una tercera persona en medio de ellas y ahí sobrevino el “panic attack”.
Horrorizada, Victoria, que trabaja de enfermera, contó: “Subí la foto a Snapchat y no me di cuenta, hasta que después, más tarde esa noche, me llamó Kayley en pánico y me pidió que mirara la selfie atentamente”. “Entonces me dijo que había una figura en el fondo, pero soy bastante escéptica sobre esas cosas, pero cuando me fumo un finito veo cualquier cosa, así que en ese momento me reí”, siguió. “Pero después volví a mirar y no pude creer lo que vi. Fue aterrador”, agregó y dijo: “No podía mirar, estaba enloquecida… la señora se ríe de nosotras…”.
si yo fuese el fantasma, aprovechaba y me las culeaba a las dos. están un camión.
Las chicas, que se conocen desde hace más de 48 años, son clientas regulares del bar de la rivera de Newcastle, pero ahora dicen que lo van a pensar dos veces antes de volver. ¿Se animarán a sacarse otra selfie? Es cuestión de CREER O REVENTAR.
Halloween, a veces, se hace carne. Dos chicas inglesas entraron en pánico al descubrir que EL FANTASTMA DE UNA SEÑORA MAYOR, vestida en ropa victoriana, les arruinó una “selfie”.
Victoria Greeves, de 22 años, y Kayley Atkinson, de 23, tomaron la foto en una salida de chicas por la noche en Newcastle-upon-Tyne.
Las dos, ultrafans de las selfies, habían estado tomando unos buenos tragos cuando decidieron hacer la selfie. Pero después de ponerse en su mejor pose de trolas se dieron cuenta que había una tercera persona en medio de ellas y ahí sobrevino el “panic attack”.
Horrorizada, Victoria, que trabaja de enfermera, contó: “Subí la foto a Snapchat y no me di cuenta, hasta que después, más tarde esa noche, me llamó Kayley en pánico y me pidió que mirara la selfie atentamente”. “Entonces me dijo que había una figura en el fondo, pero soy bastante escéptica sobre esas cosas, pero cuando me fumo un finito veo cualquier cosa, así que en ese momento me reí”, siguió. “Pero después volví a mirar y no pude creer lo que vi. Fue aterrador”, agregó y dijo: “No podía mirar, estaba enloquecida… la señora se ríe de nosotras…”.
si yo fuese el fantasma, aprovechaba y me las culeaba a las dos. están un camión.
Las chicas, que se conocen desde hace más de 48 años, son clientas regulares del bar de la rivera de Newcastle, pero ahora dicen que lo van a pensar dos veces antes de volver. ¿Se animarán a sacarse otra selfie? Es cuestión de CREER O REVENTAR.