
El sexo por despecho o venganza no es bueno

Muchas veces se cree en lo que dice el popular dicho “un clavo saca a otro clavo”, que hace referencia que para olvidar a una persona luego de una ruptura hay que “estar” con otra, pero en la práctica no es tan sencillo. Es que ese último “clavo” representa al despecho que solo sirve para justificar tener sexo sin ataduras emocionales.
Sin embargo, lo que parece una solución mágica a la ruptura de una relación sólo termina por hacernos sentir peor de lo que ya estábamos. Entonces nos podemos preguntar, ¿Por qué tener sexo por despecho?
“En esos momentos en que una persona está sobrepasada por sus emociones y con una autoestima deteriorada, pudiese necesitar apoyo justamente en esa área y mostrarse vulnerable, necesitando cuidado, protección, cariño y seguridad, quedando expuesta a involucrarse en una nueva relación”, explica el psicólogo René Moya, subdirector del Centro Psiquis de Santiago.
En tanto, la ciencia explica que “tener relaciones sexuales para vengarse de una ex pareja o para superar una pena, no ayuda a superarlo, por el contrario, podría ser un proceso más lento”.
Es así que la investigación chilena acuñó la definición de “sexo rebote” cuando se ha terminado una relación seria y al poco tiempo se comienza a tener relaciones sexuales con otra persona para tratar de subsanar el dolor emocional. De igual modo, hace referencia al “sexo por venganza” como sólo para mantener celoso al ex. Ninguna de las dos son recomendable.
