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Luego que el mundo de la música quedara conmocionado al enterarse que el ex cantante de la banda galesa "Lostprophets", Ian Watkins, reconociera los cargos de delitos sexuales con menores de edad, han salido más detalles a la luz.

Ian confesó que tocó indebidamente a un bebé de un año; animó a una fan del grupo a abusar de su propio hijo durante una conversación por "webcam" y admitió estar en posesión y filmar pornografía infantil.

Junto con eso, el diario británico Daily Mail publicó una serie de detalles que quedaron al descubierto, como su calidad de "embajador" en una fundación de transplantes renales para niños, la que usaba para visitar a jóvenes enfermos en distintos hospitales de Gales.

Inclusive, Ian encabezó una campaña para que la gente donara más órganos. El citado medio publicó varias fotografías de las visitas que realizó Watkins a los jóvenes en hospitales, comparándolo con el ex presentador de la BBC Jimmy Savile, acusado de pedofilia.

Según indica el medio inglés, en el momento en que las imágenes (ver acá) fueron tomadas, Watkins ya había perpetrado una serie de delitos sexuales, entre los que estaban el intento de violación de un bebé de 11 meses.

Sin embargo, Daily Mail indica que una ex novia del cantante ya había advertido a la policía inglesa sobre el comportamiento de Ian. La mujer, identificada como Joanna Majic (38) sostuvo que fue el propio músico quien le reveló que sus fantasías sexuales giraban en torno al abuso infantil. Agregó que en más de una ocasión había ido a la policía, quienes según Majic no tomaron ninguna medida contra de él.

Es más, la ex novia relató que en una oportunidad Watkins le mostró un video tan horrible que lo echó de su habitación. Durante la audiencia, el cantante reconoció el uso de sustancias duras, como drogas de "clase A" incluyendo el Crystal Meth o Metanfetamina durante la ejecución de sus fantasías sexuales con menores.

Además de los dos intentos de violación, el ex cantante admitió tres cargos por agresión sexual a menores; seis relacionados con la posesión y creación de imágenes sexuales de menores y uno por "pornografía extrema".