Messi llegó para despedir a Grondona y ya está en el predio de Ezeiza
El velatorio de Grondona
El rosarino arribó esta mañana desde Barcelona para despedir los restos del presidente de la AFA. Esta noche regresaría a Europa. También llegó el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.
Lionel Messi llegó esta mañana al país para asistir al velatorio del presidente de la AFA, Julio Humberto Grondona, quien falleció el miércoles a los 82 años como consecuencia de una afección cardíaca.
El capitán del seleccionado argentino arribó al aeropuerto internacional de Ezeiza a las 6.04 en un vuelo de Aerolíneas Argentinas procedente de Barcelona.
El rosarino se encontraba de vacaciones junto a su familia en la Costa Amalfitana, en Italia, y cuando se enteró del deceso de Grondona se trasladó hasta Barcelona y desde allí a la Argentina, donde estará solo unas horas, ya que tiene previsto regresar posiblemente esta misma noche. Messi llegó sin equipaje a la estación aérea y se trasladó de inmediato en un VW Vento color verde esmeralda al predio que de la AFA, donde son velados desde la noche del miércoles los restos de Grondona.
Poco después del arribo del crack argentino, a las 7.30, llegó al aeropuerto Joseph Blatter, el presidente de la FIFA, órgano del cual Grondona era vicepresidente senior. El suizo también se trasladó inmediatamente al predio de Ezeiza, a donde llegó en un Mercedes Benz color gris. "Era un amigo de toda la vida, su fallecimiento representa una pérdida enorme para la institución madre del fútbol mundial", había escrito Blatter en su cuenta de Twitter, al enterarse del deceso de Grondona.
La partida de cortejo fúnebre está prevista para las 11, previa misa a cargo del padre Juan José Medina, capellán de la Asociación del Fútbol Argentino. La caravana, que finalmente no pasará por la sede de AFA en la calle Viamonte, será encabezada por dos autobombas del cuartel de Bomberos de Sarandí y un cuerpo de la Policía motorizada.
Los restos del presidente de la AFA serán trasladados al mediodía a una bóveda del Cementerio de Avellaneda, donde también descansa su esposa, Nélida Pariani, quien falleció el 16 de junio de 2012.