Ninguno de los palestinos ejecutados bajo la acusación de “colaboración” con Israel, por la organización terrorista islámica Hamás, durante la Operación Margen Protector, era una fuente o un agente del servicio israelí, dijo un oficial de inteligencia, según un reporte del portal de internet The Times of Israel.

“Ni siquiera uno de los 27 [asesinados] era una fuente”, subrayó el oficial, quien añadió que durante la Segunda Intifada, hace una década atrás, “sólo uno y medio” [1.5 por ciento] del total de las fuentes fueron asesinadas durante una ola de ejecuciones palestinas de presuntos colaboradores que acabó con la vida de decenas de personas.
El Servicio de Seguridad General (Shabak) se abstiene a comentar sobre la identidad de sus fuentes pero confirmó al portal de noticias que todos los palestinos ejecutados por Hamás durante la Operación Margen Protector habían estado presos en Gaza durante el curso de las hostilidades. Si ese fue el caso, probablemente ninguno de ellos habría cumplido algún rol en las numerosas operaciones israelíes en Gaza – desde la localización de los sitios de lanzamiento de cohetes hasta los ataques selectivos -.
El 21 de agosto pasado, durante una operación conjunta con del Shabak, el Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal) eliminó a los jefes del Comando Sur de Hamás, Mohammed Abu Shamaleh y Raed Al Attar y al alto contrabandista de armas Muhammad Barhum. Todos ellos habían sido miembros fundadores de la Brigada Izz ad Din al Qassam, el brazo militar de Hamás. Horas antes, la Fuerza Aérea había atentado contra la vida del jefe militar de Hamás, Mohammad Deif, cuyo estado de salud aún no ha sido aclarado.
Según el oficial, ninguno de ellos fue atacado en base a información obtenida por inteligencia humana.
En respuesta, los terroristas de Hamás, con las caras cubiertas y vestidos de negro lanzaron una ola de ejecuciones públicas en las calles, ante la presencia de numeroso público. Las víctimas fueron acusadas de colaborar con Israel y asesinadas a sangre fría frente a la multitud.
Tawfiq Tirawi, miembro del Comité Central de Fatah, y ex jefe de seguridad de Cisjordania, insinuó que los palestinos muertos eran rivales de Hamás y no colaboradores.
"¿Quiénes eran esas personas que fueron ejecutadas?", preguntó Tirawi a Awdeh TV, un canal de televisión de Al Fatah. "Algunos de los que fueron ejecutados eran ex oficiales del aparato de seguridad de la Autoridad Palestina".
"¿Usted los juzgó? ¿Les interrogó? ¿Dónde están sus confesiones? ", señaló. "¿O es que tal vez usted trajo a los que fueron interrogados y ejecutados por los hombres de Hamas? ¿Por qué? ¿Bajo qué pretexto? "
Tirawi dijo que no quería comparar a Hamas con el Estado islámico; pero lo hizo con rápidamente. "¿Cuál es la diferencia?", se preguntó retóricamente. "¿Cuál es la diferencia entre alguien que decapita y alguien que dispara [con una ametralladora]?"
Eventualmente, el líder de Fatah acusó a ambos grupos de asesinato.

Durante el comienzo de la operación, fuentes de seguridad palestinas no identificadas de Gaza dijeron a medios palestinos que Hamas había detenido a decenas de presuntos colaboradores en el barrio de Shuyaiya, y que después de una corta investigación fueron ejecutados tras un juicio sumario. Los oficiales de Hamás alegaron que muchos de los sospechosos fueron capturados con armas, teléfonos y tarjetas SIM del proveedor de telefonía celular israelí Orange.
The Times of Israel reporta que la fuente de inteligencia rechazó estas afirmaciones y puso de relieve que se trata de una "ficción". La fuente destacó que los rivales de Hamás son a menudo asesinados y las disputas familiares se zanjan bajo el disfraz de una purga de espías israelíes. El asesinato, según expresó, es visto como una especie de logro que borra la “mancha” del éxito israelí.
Un oficial del Shin Bet dijo al portal de internet que los asesinatos públicos de Hamas sirvieron "simplemente como un elemento de disuasión" interna para los habitantes de Gaza.