Así lo expresó Noé Ruíz Malacara, activista, indicó que en Coahuila hay 220 relaciones con intensión de casarse y 80 de ellas están interesadas en adoptar.
Las personas que pretenden formar una familia homoparental no quieren adoptar a un niño para convertirlo en homosexual, o para violarlo, es importante que la sociedad lo sepa, consideró el activista Noé Ruiz Malacara.
Expuso que una vez vigente el matrimonio igualitario en Coahuila, hay 220 parejas con intención de casarse y 80 de ellas estarían interesadas en adoptar.
De hecho, la posibilidad de adopción y el acceso a la seguridad social son las ventajas que el presidente de la asociación civil San Elredo destaca más del matrimonio.
Noé Ruiz comentó que lograr el entendimiento social no es sencillo pero no lo ven imposible.
"Debemos partir de que uno de los principales derechos de los niños es tener una familia y decirle a la gente que la población lésbico gay no recluta gente para hacerla gay o lesbiana, son parejas que hacen un consenso para poder adoptar a un niño y adoptar a un niño no es para convertirlo en gay o lesbiana, tampoco para violarlo ni hacer cualquier tipo de vejación", aseguró.
Al contrario, agregó "es para desbordar ese amor que se tiene adentro y que un hijo siempre viene a complementar esta parte de la familia”.
Lograr el entendimiento social no es sencillo, pero "no lo vemos como imposible, pues desde 2007 Coahuila tiene la figura del pacto civil y poco a poco se ha ido llevando a cabo esta parte de sensibilización. Además existen familias homoparentales no sólo en Coahuila, en todo el mundo y esto nos ha ayudado mucho a visibilizar a estas familias en las escuelas, centros de trabajo, círculos de amigos”.
El sábado anterior se celebró el primer matrimonio homosexual en Coahuila, entre los saltillenses Luis Alberto Reyes Soto y Fernando Covarrubias Monsiváis, quienes anticiparon que iniciarán los trámites para adoptar.
