Peruanos presos en Japón inician una huelga de hambre
TOKIO. El parlamentario andino Alberto Adrianzén Merino pidió al gobierno de Japón evaluar el otorgamiento de libertad condicional para los tres migrantes peruanos irregulares.
Según informó el parlamentario, nuestros connacionales estarían hace varios días en huelga de hambre dentro del Centro de Detención de Inmigraciones de Nagoya. “Nuestros compatriotas junto a 27 migrantes de diferentes nacionalidades iniciaron la huelga de hambre para que se les otorguen el karihome (libertad condicional), para solicitar una visa especial de residencia”, indicó.
Adrianzén sostuvo que nuestros compatriotas tomaron esa desesperada decisión porque llevan mucho tiempo detenidos.
Como es el caso de Christian Uribe Miyashiro (37), quien el 9 de noviembre cumplirá 9 meses dentro de ese centro de detención.
Igualmente, saludó la presta acción de la cónsul peruana en Nagoya, Claudia Miranda, que ya pidió a las autoridades de Inmigración, saber el estado de salud de nuestros coterráneos.
“El Perú ha acogido siempre muy bien a los migrantes japoneses, en reciprocidad a esa actitud pedimos un trato humano para nuestros connacionales, que es gente trabajadora”, concluyó Adrianzén.
TOKIO. El parlamentario andino Alberto Adrianzén Merino pidió al gobierno de Japón evaluar el otorgamiento de libertad condicional para los tres migrantes peruanos irregulares.
Según informó el parlamentario, nuestros connacionales estarían hace varios días en huelga de hambre dentro del Centro de Detención de Inmigraciones de Nagoya. “Nuestros compatriotas junto a 27 migrantes de diferentes nacionalidades iniciaron la huelga de hambre para que se les otorguen el karihome (libertad condicional), para solicitar una visa especial de residencia”, indicó.
Adrianzén sostuvo que nuestros compatriotas tomaron esa desesperada decisión porque llevan mucho tiempo detenidos.
Como es el caso de Christian Uribe Miyashiro (37), quien el 9 de noviembre cumplirá 9 meses dentro de ese centro de detención.
Igualmente, saludó la presta acción de la cónsul peruana en Nagoya, Claudia Miranda, que ya pidió a las autoridades de Inmigración, saber el estado de salud de nuestros coterráneos.
“El Perú ha acogido siempre muy bien a los migrantes japoneses, en reciprocidad a esa actitud pedimos un trato humano para nuestros connacionales, que es gente trabajadora”, concluyó Adrianzén.