Te damos la bienvenida a la comunidad de T!Estás a un paso de acceder al mejor contenido, creado por personas como vos.

O iniciá sesión con
¿No tenés una cuenta?
La nueva Chica Crónica se llama Florencia Garmilla. Es modelo, estudió periodismo y es fanática de San Lorenzo. Le gusta cocinar, preparar tragos e ir al gimnasio.



Edad: 20.
Estatura: 1,51.
Medidas: 85-60-90.
Signo: Acuario.

Nació en Trenque Lauquen, pero a los 7 años se mudó Boedo. Se enamoró del barrio y de San Lorenzo, pese a que en su familia sólo hay hinchas de Central y de Boca.

¿Cuándo empezaste a modelar?

Hace dos meses. Subí fotos mías al Facebook, me vieron y me convocaron para hacer presencias en un boliche de Palermo y en otro de Flores. Después me invitaron a hacer una producción de fotos, y se fue armando una cadena. Lo último fue una promoción para una tarjeta de crédito y para la de una famosa cadena de supermercados.

¿Te preparaste?

Estoy estudiando modelaje en la escuela de Anamá Ferreira y en diciembre me recibo de profesora de pole dance. Quiero ser una modelo reconocida, desfilar para un diseñador importante o en la tele, y no descarto trabajar como bailarina.

De no llegar como modelo o bailarina, ¿qué te gustaría ser?

Periodista. Hice el CBC para entrar a la UBA, pero tuve que dejar. Cuando iba a visitar a mi abuela, a Trenque Lauquen, hacía un programa de radio. Era la conductora, la locutora y la operadora.

¿Sos extrovertida?

Me cuesta entrar en confianza, pero cuando me suelto soy cero vergüenza. Tengo mi temperamento, digo las cosas de frente sin medir si a la otra persona le molesta o no.

¿Un hobbie?

Varios. Cocinar (mi especialidad son los dulces; me gustaría ser chef), preparar tragos (hice un curso de bartender) e ir al gimnasio tres veces a la semana.

¿Novio?

Sí, desde hace cinco años. Aunque vamos y venimos, tenemos peleas de adolescentes. Éramos compañeros en la escuela secundaria. No le gusta que me muestre, pero tendrá que entenderlo.

Una fantasía…

Hacer el amor en el último escalón de la tribuna local, en el Nuevo Gasómetro, durante un partido, sin que nadie nos descubra.