¡A la pelotita! el 10 confesó que Aguilar y Passarella lo tentaron para que cambiara de vereda: "Fue una situación extraña. Jamás lo hubiese esperado".
Ya desde antes de que terminara el partido de Boca en La Paz, Canal 13 empezó a anunciar que Riquelme saldría en vivo por Telenoche. Y así fue: desde su casa de Don Torcuato y acompañado por Sergio Gendler, si bien no se animó a tutear a Santo Biasatti ni a María Laura Santillán, Román se mostró abierto, distendido, con soltura para confesar, por ejemplo, que José María Aguilar se quiso anticipar a Macri en eso de obsequiarle un Topo Gigio... ¡y con la camiseta de River! "Fue una situación extraña. Jamás la hubiese esperado. Y tengo que decir que es verdad que el presidente de River me llamó varias veces para interesarse por mi problema. Además, tengo una relación bastante buena con el técnico de River. Por eso les agradezco que se hayan preocupado por mi situación en el Villarreal. Pero yo tengo tanto compromiso con la camiseta de Boca, me llamó River pero en este país no puedo jugar con otra". Clarito. Que Aguilar y Passarella lo querían en River pero el amor del 10 por Boca fue, como siempre, más fuerte.
En esta línea, "muy feliz" y "muy ansioso" por volver a jugar en la Bombonera, Riquelme analizó el 0-0 que acababa de ver por televisión: "Es muy complicado jugar en la altura. Pero Boca lo hizo bien y tuvo muchas chances de marcar. El arquero de ellos estuvo muy bien. Cuando no se puede ganar hay que empatar. Pero en casa las cosas van a cambiar. Si hacemos las cosas bien, no vamos a tener problemas en pasar de ronda".
Después habló de lo que se viene, su vuelta frente a Central: "Si fuese por mí, jugaría todos los días. Hace casi dos meses que no puedo jugar un partido entero. Tengo muchas ganas. Y si me toca jugar, seguro estaré los 90 minutos".
—¿Y qué opina tu mamá de todo esto?, le preguntó Santillán, bien enfocada.
—Mi mamá está muy feliz, contenta, porque me va a tener con ella durante unos meses. La voy a molestar mucho, porque tendrá que cocinar para 30 personas. Pero ella lo hace con felicidad. Yo quiero disfrutar este momento, cada partido.
Como el tema estaba rondando, claro, la charla derivó a la Selección Argentina: "El otro día la Selección jugó bien contra Francia. Y en la Copa América seguro que va a ser candidata. Yo con el Coco (Basile) tengo una relación muy buena. Es un tipo frontal y a mí me gustan esas personas. En el primer partido me dio la cinta de capitán. No tengo ningún problema en sentarme a hablar con él. Pero ahora mi obligación es pensar en Boca".
Sobre el cierre, Santo le preguntó en qué había cambiado en estos años en España. "Soy el mismo", se plantó Román. "No tengo problemas en hablar de fútbol. Lo que no me gusta es hablar de cosas raras".
Fuente: http://www.ole.clarin.com/notas/2007/02/15/01363907.html
Ya desde antes de que terminara el partido de Boca en La Paz, Canal 13 empezó a anunciar que Riquelme saldría en vivo por Telenoche. Y así fue: desde su casa de Don Torcuato y acompañado por Sergio Gendler, si bien no se animó a tutear a Santo Biasatti ni a María Laura Santillán, Román se mostró abierto, distendido, con soltura para confesar, por ejemplo, que José María Aguilar se quiso anticipar a Macri en eso de obsequiarle un Topo Gigio... ¡y con la camiseta de River! "Fue una situación extraña. Jamás la hubiese esperado. Y tengo que decir que es verdad que el presidente de River me llamó varias veces para interesarse por mi problema. Además, tengo una relación bastante buena con el técnico de River. Por eso les agradezco que se hayan preocupado por mi situación en el Villarreal. Pero yo tengo tanto compromiso con la camiseta de Boca, me llamó River pero en este país no puedo jugar con otra". Clarito. Que Aguilar y Passarella lo querían en River pero el amor del 10 por Boca fue, como siempre, más fuerte.
En esta línea, "muy feliz" y "muy ansioso" por volver a jugar en la Bombonera, Riquelme analizó el 0-0 que acababa de ver por televisión: "Es muy complicado jugar en la altura. Pero Boca lo hizo bien y tuvo muchas chances de marcar. El arquero de ellos estuvo muy bien. Cuando no se puede ganar hay que empatar. Pero en casa las cosas van a cambiar. Si hacemos las cosas bien, no vamos a tener problemas en pasar de ronda".
Después habló de lo que se viene, su vuelta frente a Central: "Si fuese por mí, jugaría todos los días. Hace casi dos meses que no puedo jugar un partido entero. Tengo muchas ganas. Y si me toca jugar, seguro estaré los 90 minutos".
—¿Y qué opina tu mamá de todo esto?, le preguntó Santillán, bien enfocada.
—Mi mamá está muy feliz, contenta, porque me va a tener con ella durante unos meses. La voy a molestar mucho, porque tendrá que cocinar para 30 personas. Pero ella lo hace con felicidad. Yo quiero disfrutar este momento, cada partido.
Como el tema estaba rondando, claro, la charla derivó a la Selección Argentina: "El otro día la Selección jugó bien contra Francia. Y en la Copa América seguro que va a ser candidata. Yo con el Coco (Basile) tengo una relación muy buena. Es un tipo frontal y a mí me gustan esas personas. En el primer partido me dio la cinta de capitán. No tengo ningún problema en sentarme a hablar con él. Pero ahora mi obligación es pensar en Boca".
Sobre el cierre, Santo le preguntó en qué había cambiado en estos años en España. "Soy el mismo", se plantó Román. "No tengo problemas en hablar de fútbol. Lo que no me gusta es hablar de cosas raras".
Fuente: http://www.ole.clarin.com/notas/2007/02/15/01363907.html